Ivana Nadal salió al cruce después que revocaran su visa en EEUU: “No estoy varada ni me deportaron”

Esta vez no fue por un posteo sobre el amor propio o la búsqueda espiritual. Ivana Nadal se convirtió en noticia porque la Embajada de los Estados Unidos revocó su visa y por el momento no podrá instalarse allí.

Tras las repercusiones que tuvo esta situación, la mediática decidió salir al cruce y aseguró que no fue deportada.

Su descargo apareció en una historia de Instagram, donde dejó en claro que se encuentra muy tranquila en Argentina. “Me llamó mi abuelita para ver si me había pasado algo de lo que ella no estaba enterada”, arrancó diciendo con cierta indignación.

Para cerrar el posteo, donde se la puede ver muy relajada, dio a conocer cómo se encuentra en este momento. “No me deportaron ni estoy varada. Estoy en mi casa comiendo papitas”, concluyó.

La visa de talentos: el objetivo de Ivana Nadal para vivir en los Estados Unidos

Después de que trascendiera que habían revocado la visa que tenía Ivana Nadal para estar transitoriamente en los Estados Unidos, se conoció cuál es la estrategia que tiene para poder vivir en Miami: obtener una visa de talentos.

“Alguien denunció, o no sabemos si fue solo por los medios de comunicación, que ya estaba viviendo allá y que había vendido todas las cosas acá”, sostuvo su asistente en un audio al que tuvo acceso Marina Calabró.

Y añadió: “Tenemos planes de irnos para allá pero aplicando para la visa de talento, todo legal. Y ahora esto nos estaría cagando un poco todo, se nos trunca todo lo que teníamos pensado para hacer dentro de un mes”.

Ivana Nadal salió al cruce después que revocaran su visa en EEUU: “No estoy varada ni me deportaron”

No es nada sencillo acceder a una visa O, también conocida como “visa de talento”. A la misma pueden aplicar “personas con habilidades extraordinarias”, según detalla el sitio de la Embajada de Estados Unidos.

Lo cierto es que la mediática empezará un proceso que no es rápido ni sencillo. El primer paso es demostrar que tiene virtudes de las cuales prescinde cualquier ciudadano norteamericano en disciplinas como ciencias, artes, educación, negocios o deportes.