Un proyecto con conciencia social y solidaria

Chapeando por amor a los animales

Carla adoptó a Oso, que estaba muy herido y en estado de abandono. Ahora vende chapas personalizadas para mascotas, para costear los gastos que conlleva su problema de salud
martes 24 de noviembre de 2020 | 6:01hs.
Carla adoptó a Oso hace más de dos años; desde entonces son inseparables.  Fotos: Nicolás Oliynek
Carla adoptó a Oso hace más de dos años; desde entonces son inseparables. Fotos: Nicolás Oliynek

“A Oso, la primera vez que lo vi fue en las publicaciones de Facebook, cuando las rescatistas estaban pidiendo tránsito para él, porque estaba en completo estado de abandono y arrastrándose con la fuerza de sus patas delanteras”, contó Carla Kreibohm, quien desde aquel día adoptó a Osito, como lo llama con cariño.

Ahora, la joven estudiante de veterinaria utiliza las mismas redes sociales para seguir ayudando a su amigo y recaudando fondos para costear los gastos que conlleva el problema de salud que el can padece desde que llegó a su nuevo hogar.

De aquel primer encuentro ya pasaron más de dos años. En ese entonces, Oso estaba muy flaco, lleno de garrapatas y piojos, en completo estado de abandono y muy mal herido, probablemente por sufrir un accidente. “Cuando vi esa publicación se me partió el corazón, no pude hacer la vista gorda y le rogué a mi mamá que me dejara traerlo a casa”, rememoró la joven en diálogo con El Territorio.

Así comenzó la amistad que los une hasta hoy. Pero los días no fueron fáciles. Una vez que lo trajeron del barrio A4, comenzó un largo tratamiento de recuperación. “La idea en un principio era llevarlo al veterinario, ver si podía recuperar la movilidad en las patas traseras, pero Oso nunca pudo lograrlo”, contó Carla.

Sus músculos se atrofiaron y no siente sus patas posteriores. Además, también tiene vejiga neurogénica, una disfunción del órgano causado por un daño neurológico, por lo que no tiene control de esfínteres.

Durante varios meses realizaron tratamientos de terapia, acupuntura, inyecciones y ecografías. Pero nada dio resultados positivos respecto a su problema. Sin embargo, Carla se encargó de cuidarlo y ayudarlo a mejorar. Y aunque Oso no camina, sale a pasear con un carrito que la propia estudiante diseñó. Además, tiene buen ánimo, se alimenta bien y “está muy mimado”, dijo la joven entre risas, quien siente la gratificación y alegría de haber asistido y ayudado a un animal que lo necesitaba. “Porque ellos necesitan nuestro cariño, no tienen voz y debemos darles una”, recalcó.

Autogestión solidaria
Su intención de ayudar a Oso a salir adelante y los gastos económicos que implican costear los problemas de salud que acarrea el animal la llevaron a emprender una idea innovadora.

“Tenemos muchos gastos porque Oso usa alrededor de tres pañales para adultos por día, además de sondas gasogátricas K33, que se cambian diariamente y todo ello conlleva dinero”, dijo la joven que, con la ayuda de su hermano ideó la impresión de chapas personalizadas, para venderlas en las redes y así recaudar fondos para los gastos que surgen.

De esa manera diseñó chapas con forma de hueso, creadas en una impresora 3D, que son pintadas artesanalmente por la joven y llevan también el nombre de la mascota. “Se me ocurrió esta idea como una manera de costear los gastos que a veces se escapan de mi presupuesto. Así puedo seguir dándole a Osito lo que necesita para llevar una buena calidad de vida”, resumió Carla al tiempo que hizo referencia a que siempre se puede ayudar a los que necesitan.

“Me gustaría que las personas se responsabilicen y se concienticen sobre la tenencia responsable de las mascotas. Ellos necesitan de nuestra atención y cariño. Me gustaría que la gente se anime a involucrarse porque realmente es muy emotivo y gratificante ver cómo un granito de arena puede ayudarles mucho, ya sea donando a los refugios o también a los rescatistas. Involucrarse es importante, es necesario”, detalló.

Así, los interesados en colaborar con la causa y adquirir las chapitas personalizadas pueden comunicarse con Carla a través de las redes sociales @carlakreibohm en Instagram o Facebook.

Chapeando por amor a los animales
¿Que opinión tenés sobre esta nota?