La mamá de Neris denunció demoras de la ambulancia

Lo hizo mediante una denuncia en la Comisaría Decimotercera que recayó en el Juzgado de Instrucción Seis, a cargo del magistrado Ricardo Balor, el mismo que tiene sujetos a proceso a los hermanos sindicados como autores del homicidio en la chacra 247 del barrio Manantiales. 

Fue el inicio de un proceso con el que se busca determinar si desde dicho organismo existe algún grado de responsabilidad en la muerte.

En función de eso fue citada recientemente a declarar en calidad de testigo, ponderando en ese contexto la actitud de la Policía de Misiones, cuyos uniformados esa noche decidieron llevar por sus propios medios al herido hasta el Hospital Favaloro después de intentar sin éxito que una unidad de traslado acuda a los llamados que al parecer no fueron solamente policiales, sino también de familiares e incluso de vecinos.

En la acusación -ratificada en formato de testimonial-, la mujer detalló que Exequiel estuvo alrededor de una hora tirado en la calle, desangrándose, sin asistencia médica. 

Lucía recordó que “ese domingo (9 de diciembre de 2018) a las 21.30 le avisaron a mi hijo Franco que habían apuñalado a su hermano en la calle, por lo que corrió hasta la casa de mi papá y llamaron por primera vez al 107. Después regresó al lugar para ver qué pasaba, siendo que ya estaba la Policía, quienes también habían llamado al 107, lo que reiteraron varias veces después. Pero pasó alrededor de una hora porque eran las 22.40 y al ver que la ambulancia no llegaba y que mi hijo se desangraba, los policías lo alzaron al patrullero y lo llevaron al Hospital Favaloro, después de ahí recién al Madariaga”. 

En esa línea, aseguró que a su criterio “no hubo asistencia para mi hijo e incluso el forense reconoció que si le asistían en tiempo y forma a lo sumo podría haber perdido la pierna, pero en ningún momento fue asistido profesionalmente y el resultado fue la muerte”.

En los próximos días deberán comparecer ante el magistrado otras personas que, según Lucía, se comunicaron solicitando la asistencia de una ambulancia en esa noche post Superclásico.

Homicidio post superclásico
El crimen de Exequiel Neris en inmediaciones de las avenidas Jauretche y Andresito del barrio Manantiales ocupó un espacio importante en los diarios de este país e incluso de medios internacionales, debido a que ocurrió en medio de los festejos por la obtención de la Copa Libertadores de América, que en diciembre del año pasado quedó en manos de River tras ganarle a Boca por 3 a 1 en el estadio Santiago Bernabéu de Madrid.

Nero, como le decía la gente que lo quería y con quien se relacionaba, era hincha del Millonario. No fanático, pero como todos los simpatizantes se unió a los festejos y en ese contexto aparecieron ambos hinchas del cuadro rival que lo apuñalaron luego de un cruce verbal potenciado por las gastadas. 

Herido de gravedad buscó ayuda, pero la profundidad de la herida dañó una arteria principal, ocasionando un profuso sangrado y en consecuencia un shock hipovolémico. 

Esa noche, los sindicados asesinos escaparon hasta que un día después los capturaron. Son del mismo barrio y conocidos de la víctima.

Investigación y pericias
Los acusados de haber cometido el crimen son hermanos: Augusto (26) y José A. (18). Cinco días después de ser detenidos y con evidencia de peso en su contra, se presentaron ante el titular del Juzgado de Instrucción Seis, Ricardo Balor, pero se abstuvieron de declarar en la instancia indagatoria, evitando de esa forma hablar de lo que ocurrió esa noche.

El menor de los implicados fue imputado por el delito de homicidio simple, porque estaría confirmado en base a testimonios y elementos de prueba que fue el autor de la estocada mortal, en tanto que en el mayor la acusación sería transitoria, siendo investigado como el que originó el enfrentamiento y podría ser considerado participe necesario.

Los sindicados asesinos permanecen detenidos en dos dependencias policiales distintas. El magistrado que lleva adelante la causa espera informes resultantes de una serie de pericias para avanzar en el expediente, entre ellas el análisis del material genético que levantaron del cuchillo utilizado y de algunas prendas de vestir con manchas de sangre, incautadas en los allanamientos que hicieron en sus domicilios. 

Sobre los detenidos, fueron capturados por efectivos de la Decimotercera y la Dirección de Homicidios. Uno de ellos cayó camino a su trabajo, mientras que el otro, durante el allanamiento realizado en su vivienda en la que también encontraron el cuchillo de 30 centímetros de hoja, en el pozo de un baño tipo letrina.

Dispuestos ante requerimientos
Desde la Red de Traslados no hicieron declaraciones al respecto, aunque señalaron que como todo organismo público están dispuestos a cumplir con los requerimientos judiciales, si es que existen en algún momento. El departamento Jurídico del Ministerio de Salud estaría al tanto de la acusación y es probable que por esa vía sean requeridos los registros de llamadas hechas por la familia Neris y la Policía, esa noche en que, dicen, pidieron reiteradamente la ambulancia.