Estuvo en el Mundial de Robótica; hoy vende pastelitos para su recepción
martes 18 de diciembre de 2018 | 2:00hs.
Estuvo en el Mundial de Robótica; hoy vende pastelitos para su recepción
Por Griselda Acuña interior@elterritorio.com.ar
Sin importar el pronóstico del tiempo, la familia se prepara para acompañar el proyecto de Cyntia. Se la puede ver, canasto mediante, recorriendo la fila de autos que espera para cruzar a Encarnación por el puente internacional Roque González de Santa Cruz, o bien caminando por los lugares más concurridos de la Costanera de Posadas.
Ella tiene un sueño, y lejos de considerarlo inalcanzable, está empeñada en lograrlo a base de dedicación y esfuerzo. Su sueño, en realidad, se transformó en el plan perfecto para el próximo año: fiesta de recepción y viaje de egresados. Un viaje diferente, dado que decidió, con su grupo de amigos, ir a Europa durante una semana.
Cynthia Beutler (17) pasó a sexto año en el Instituto Politécnico San Arnoldo Janssen, representó al país en el Mundial de Robótica que se realizó en México meses atrás, y mientras vende pastelitos para concretar sus proyectos de cara a 2019, también fijó con determinación la continuidad de su vida académica. En el año 2020 se irá a Mendoza a estudiar Ingeniería Mecatrónica.
“Es un gasto importante y la economía no es muy buena. Me gustaría tener el orgullo de decir que ayudé a mamá a pagar mi viaje y mi recepción”, dice Cyntia en diálogo con El Territorio con su sonrisa característica y un tono que lleva, quizás, a confundir su origen, pero la respuesta la tiene su madre, Yolanda. “Ella y sus hermanas sólo miraron un canal de dibujitos, con lenguaje neutro, y les quedó”, comenta. Para que no queden dudas, Cyntia es de Posadas, como toda su familia. La mamá, tras quedar viuda, salió adelante con las tres niñas a quienes les deja el mayor legado: nunca rendirse.
De su preparación para ir a México cuenta que “semana tras semana viajé a Buenos Aires para armar el robot y además cursar el Jannsen, que de por sí es mucho tiempo, fue algo muy demandante. Fue una experiencia que te enseña disciplina y trabajar por lo que uno quiere, no es algo nuevo en ese sentido, ya que en la Escuela de Robótica nos enseñan a lidiar con personas con las que no estás de acuerdo”.
Al regresar del país azteca se plantó desde otro lugar para tomar futuras decisiones: “Las otras culturas con las que me encontré allá también me dejaron un poquito de cada paisaje. Ver paisajes de otros países te hace crecer como persona, te hace ver las cosas de manera diferente, es como leer un libro”, desliza. La joven habla inglés y además estudia portugués y alemán.
“¿Recreo de qué? Me gusta lo que hago y le pongo cariño a todo. No me siento fastidiada ni me quejo de que mi vida sea miserable”, responde Cyntia al ser consultada sobre su tiempo libre.