Masiva marcha en honor a Soleimani en Bagdad pidió “muerte a EE.UU.”

domingo 05 de enero de 2020 | 3:00hs.
Masiva marcha en honor a Soleimani en Bagdad pidió “muerte a EE.UU.”
Masiva marcha en honor a Soleimani en Bagdad pidió “muerte a EE.UU.”
Miles de milicianos y otros simpatizantes que coreaban “Estados Unidos es el gran Satanás” marcharon ayer en una procesión fúnebre en Bagdad en honor del principal general de Irán, después de que murió en un ataque aéreo estadounidense, mientras la región se preparaba a que la República Islámica cumpla sus promesas de venganza.
El general Qassem Soleimani, jefe del grupo élite iraní Fuerza Quds y artífice de la estrategia de seguridad de la República Islámica en el extranjero, murió en la madrugada del viernes en un ataque perpetrado en las inmediaciones del aeropuerto de la capital iraquí, junto con líderes insurgentes iraquíes.
Los participantes de la marcha, muchos de ellos llorando, corearon “No, no, Estados Unidos” y “Muerte a Estados Unidos, muerte a Israel”. Mohammed Fadl, uno de los que iban de luto, apuntó que el funeral es una muestra de lealtad a los líderes caídos: “Este es un golpe doloroso, pero no nos sacudirá”.
El ataque aéreo, ordenado por el presidente Donald Trump, elevó las tensiones regionales y puso a prueba la alianza de Estados Unidos con Irak.
Irán prometió responder al ataque con dureza, lo que elevó el temor a una posible guerra total, pero no está claro cómo o cuándo podría hacerlo. Es probable que haya represalias después de tres días de duelo declarado por el líder supremo, el ayatolá Alí Jamenei.
Todos los ojos estaban puestos en Irak, donde Estados Unidos e Irán han competido por tener influencia desde la invasión liderada por Estados Unidos en 2003.
Trump dijo que ordenó la operación (una decisión de alto riesgo que tomó sin consultar al Congreso ni a los aliados de Estados Unidos) para evitar un conflicto. La Casa Blanca aseguró que Soleimani estaba preparando una serie de ataques que ponían en peligro a funcionarios y soldados estadounidenses, pero no ofreció pruebas.
Soleimani era el arquitecto de la política regional iraní de movilización de milicias en Irak, Siria y Líbano, incluso en la lucha contra el grupo extremista Estado Islámico. Se lo acusa de ataques contra tropas estadounidenses y aliadas desde la invasión de Irakde 2003.
En Bagdad, miles de dolientes, en su mayoría hombres con uniforme militar negro, portaban banderas de Irak y de las milicias respaldadas por Teherán, que eran extremadamente leales a Soleimani. También lloraban la muerte de Abu Mahdi al-Muhandis, un destacado comandante miliciano iraquí que fue víctima del mismo operativo.
Dos helicópteros volaron por encima de la procesión, a la que asistieron el primer ministro de Irak, Adel Abdul-Mahdi y líderes de guerrillas auspiciadas por Irán.
Las puertas de la Zona Verde de Bagdad, donde hay edificios gubernamentales y embajadas, incluyendo la estadounidense, estaban cerradas.
Un funcionario de seguridad iraquí dijo que un cohete Katyusha fue lanzado el domingo por la noche y cayó en una plaza dentro de la Zona Verde, a menos de un kilómetro de la embajada norteamericana. El funcionario, que dijo que no hubo heridos, habló bajo condición de anonimato porque no estaba autorizado a hacerlo. 
El gobierno de Irak, que es un aliado próximo tanto a Washington como a Teherán, condenó el ataque que mató a Soleimani y añadió que era una violación de su soberanía. Está previsto que el Parlamento celebre una sesión extraordinaria hoy y el gobierno estaba bajo una creciente presión para expulsar a los 5.200 soldados estadounidenses asentados en la nación para ayudar a evitar la reaparición de Estado Islámico.
Estados Unidos ordenó a todos sus ciudadanos que salgan de Irán y cerró su embajada en Bagdad, que a principios de semana fue asaltada por milicianos patrocinados por Irán y sus seguidores en dos jornadas de protestas ante el complejo. 

La economía global atenta al valor del crudo

El petróleo crudo tuvo el viernes su mayor alza internacional en una sola jornada desde el ataque en septiembre contra la planta procesadora de petróleo más grande del mundo en Arabia Saudí después de que Estados Unidos asesinara al principal general de Irán en un ataque con dron. Si el alza se sostiene podría redundar en un incremento en el costo de las naftas, el combustible para calefacción y la electricidad, suponiendo un posible lastre para la economía global mientras ésta registra una desaceleración. El agravamiento de las tensiones en Oriente Medio podría causar problemas financieros a nivel mundial, en particular a Estados Unidos y China, que se prevé firmen un acuerdo comercial de “Fase 1” en unas cuantas semanas.

Bolsonaro vinculó a Soleimani con el ataque a la Amia

El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, dijo que el militar iraní Qasem Soleimani, muerto por Estados Unidos en una acción militar en Irak, tuvo participación en el ataque que en 1994 destruyó la sede de mutual judía Amia en Buenos Aires, que causó la muerte de 85 personas.
El mandatario brasileño, en declaraciones a un canal de TV local, indicó que la posición de su país es la de aliarse al “combate al terrorismo”, reafirmando el apoyo a su aliado Donald Trump.
“Nuestra posición es aliarnos a cualquier país del mundo en el combate al terrorismo. Sabemos lo que Irán representa en gran parte para sus vecinos y para el mundo”, dijo Bolsonaro. Y agregó, en referencia a Soleimani: “Era una persona que según informaciones aquí, estaría involucrada en el ataque a la Amia, aquella entidad judía que existía en Argentina”.
La cancillería brasileña, simultáneamente, recordó también en una nota que “el terrorismo no puede ser considerado un problema restricto a Oriente Medio y a los países desarrollados, y Brasil no puede permanecer indiferente a esa amenaza, que afecta inclusive a América del Sur”. 

Ataques intimidatorios y amenazas de venganza

Dos cohetes de tipo Katiusha cayeron ayer en una base aérea que aloja tropas estadounidenses en Balad, a unos 80 kilómetros al norte de Bagdad, y otro proyectil similar cayó cerca de la embajada del país norteamericano, en la denominada Zona Verde de la capital, sin que hasta el momento se conozcan cifras de heridos, informaron fuentes de los servicios de seguridad.
Si bien no se sabe si hubo víctimas en alguno de los dos ataques, las informaciones son confusas y hay versiones que indican que fueron dos los morteros caídos en Bagdad y no uno, según la agencia Ansa.
Esos proyectiles golpearon el corazón de la llamada Zona Verde, un área ultraprotegida que alberga a las principales instituciones y sedes diplomáticas de la capital iraquí.
Según señalaron medios locales, los morteros que cayeron en esa zona de Bagdad golpearon un puesto con soldados estadounidenses.
Los ataques se produjeron un día después de que Washington asesinara con drones en el aeropuerto de Bagdad a Qasem Soleimani, el general más poderoso de Irán, arquitecto de las intervenciones del país persa en la región.
La sede diplomática yanqui en Bagdad, situada en la denominada Zona Verde, fue atacada por un proyectil. También cayeron dos cohetes en una base aérea que aloja tropas estadounidenses a 80 kilómetros de la capital del país de Medio Oriente.
Por otra parte ayer el presidente de Irán, Hassan Rohani, prometió ayer -ante la familia del general Qasem Soleimani- que Estados Unidos será testigo de “las consecuencias” de la muerte del máximo jefe militar iraní, “no sólo hoy, sino a lo largo de los años venideros”.
“Vengaremos su sangre entre todos”, afirmó Rohani en una visita de pésame a la viuda y la hija de Soleimani en su casa de Teherán. 
“Los estadounidenses no se dieron cuenta del gran error que cometieron. Sin duda Estados Unidos es hoy mucho más odiado (que antes) entre la gente de Irán e Irak”, agregó el mandatario iraní.