Excarcelaron al joven que conducía el Gol involucrado en la presunta picada
martes 06 de agosto de 2019 | 0:00hs.
Excarcelaron al joven que conducía el Gol involucrado en la presunta picada
Por Jorge Posdeley fojacero@elterritorio.com.ar
Después de una semana privado de su libertad, Alejandro Gabriel R. (18), el joven que el lunes pasado protagonizó un siniestro vial en medio de una presunta picada sobre la avenida Uruguay, recuperó la libertad ayer y de esta forma ya no hay detenidos por el caso.
La excarcelación del muchacho se hizo efectiva ayer al mediodía, tras cubrir la caución de 200.000 pesos que las autoridades del Juzgado de Instrucción Uno le habían impuesto a fines de la semana pasada.
De esta manera, el joven podrá regresar a su casa y seguir en libertad la continuidad del proceso que se instruye en su contra, ya que continuará supeditado a la causa en la que está imputado por los delitos de picadas ilegales y lesiones graves en concurso real.
De igual forma, al margen de la excarcelación, las autoridades judiciales le impusieron una prohibición de conducir vehículos automotores por el término de seis meses.
Apenas unas horas antes de hacerse efectiva la liberación del muchacho, quien habló sobre la causa fue su abogado defensor, José Puyol.
El letrado dialogó con Radioactiva 100.7 y en esa instancia había indicado que la familia “estaba haciendo lo imposible para reunir el dinero” requerido por la Justicia.
Puyol señaló que la cuestión de la picada “todavía se sigue investigando” y consideró que “en este caso en particular no sucedió, no está acreditado por el momento que haya existido una organización o una coordinación entre los muchachos para que exista esa prueba de velocidad para ver quién gana a quién o quién tiene mejor vehículo. Este vehículo sí embistió a la otra persona, eso no se discute. Pero esa conducta temeraria es la que en realidad no existió como tal”.
Además, indicó que “otro dato es que el vehículo al cual embistió, al cual desde un primer momento se trató de evadir, salió de una calle de contramano, en un lugar de poca iluminación. Fue una desgracia con un poco de suerte”.
El letrado también desestimó que el Volkswagen Gol que conducía su defendido esté preparado para picadas. “Es un auto de base estándar, no estamos hablando de un Camaro ni de una Ferrari. Es un Gol que de cero a diez segundos no levanta mucha velocidad”, manifestó, al tiempo que destacó que ninguno de los involucrados abandonó la escena tras el hecho ni tampoco estaban alcoholizados.
En cuanto a la velocidad a la que iban los vehículos al momento del siniestro, Puyol señaló que “no puedo afirmar si iban muy rápido porque todavía no tenemos las pericias. Mi cliente no estaba al tanto del velocímetro porque iba prestando atención al camino, por eso logró evadir en parte cuando este vehículo se salió por sorpresa. Él aplica el freno y trata de evitar, por eso colisiona la parte lateral trasera y no le dio en todo el centro, no le dio de lleno”.
Esto último se relaciona con lo que el joven declaró ante la Justicia cuando fue citado a indagatoria ante el magistrado Marcelo Cardozo.
En dicha audiencia, desarrollada el miércoles pasado, el muchacho decidió dar su versión de los hechos y allí expresó que no circulaba a gran velocidad y que el Hyundai Coupé Génesis que conducía la damnificada, María Soledad Adorno (38), se le cruzó en forma imprevista.
Ayer a la mañana, cuando Puyol concedió la entrevista radial, su defendido todavía estaba detenido y, respecto al estado emocional del muchacho, el letrado indicó que “él es un chico de casa. Está shockeadísimo, está sufriendo demasiado, está muy atemorizado. Jamás ha tenido un antecedente y jamás ha estado detenido por ninguna causa. Está afectado por todo esto”.
Excarcelados pero imputados
Excarcelados pero imputados
Tras la excarcelación del conductor del Gol, ya no quedan detenidos por el siniestro, debido a que el otro involucrado, Franco Javier M. (21), había recuperado la libertad el sábado tras cubrir una caución de 100.000 pesos.
Este último iba al mando del Renault Clio que aparece en las imágenes circulando a la par del Gol, aunque su situación es un tanto diferente.
El muchacho también compareció ante la Justicia el miércoles pero allí optó por abstenerse de declarar y solamente fue imputado por el delito de picadas ilegales, ya que en contrapartida al Gol no colisionó contra el tercer vehículo implicado en la secuencia que casi deriva en una nueva tragedia vial.
De esta forma, ambos jóvenes comparten una imputación por infracción al artículo 193 bis del Código Penal de la Nación Argentina, el cual establece que “será reprimido con prisión de seis meses a tres años e inhabilitación especial para conducir por el doble del tiempo de la condena, el conductor que creare una situación de peligro para la vida o la integridad física de las personas, mediante la participación en una prueba de velocidad o de destreza con un vehículo con motor, realizada sin la debida autorización de la autoridad competente”.
Las imputaciones se dieron un día después de recolectar los primeros elementos existentes en la causa, entre ellos, las pericias preliminares realizadas a los vehículos mientras se encontraban incautados en el Comisaría Tercera.
En esa oportunidad, el personal de la Dirección Verificación Automotores de la Policía de Misiones revisó ambos vehículos y allí constataron que los dos tenían las suspensiones modificadas, en tanto que el Clio además tenía escapes libres.
Para los pesquisas, estas dos cuestiones son indicios suficientes como para estimar que estaba preparados para desarrollar mayor velocidad y de confirmar esto sería un elemento fuerte contra ambos jóvenes.
El caso
El caso
El hecho que generó indignación y debate social en todo Posadas se registró durante la madrugada de lunes pasado, cerca de las 2, sobre la avenida Uruguay, a pocos metros de su intersección con la calle Florencio Sánchez.
Lo que ocurrió fue que el Gol conducido por el joven de 18 años embistió desde atrás al Génesis conducido por Adorno, quien sufrió graves lesiones que le demandaron intervenciones quirúrgicas.
El camino tanto del Gol como del Clio pudo ser reconstruido, en parte, mediante la recolección de imágenes de cámaras de seguridad, las cuales registraron, por ejemplo, el momento exacto en el cual ambos vehículos se detienen en el semáforo ubicado en la intersección de Uruguay y Trincheras de San José.
A juzgar por las imágenes, pareciera que ambos automóviles utilizaron dicho semáforo como señal de largada.
Esta semana, en diálogo exclusivo con El Territorio, Adorno recordó que: “Lo vi venir pero lo vi muy lejos, por eso me imagino que venía a una velocidad excesiva. Imaginate que lo veo en Cabred y Uruguay pero a pocos segundos lo tenía encima”.
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