Terminó la reunión de la mesa de diálogo de la policía sin concretar la firma de acuerdos

Ex combatiente lucha por volver a ver a su hija tras seis años sin contacto

viernes 23 de noviembre de 2018 | 0:00hs.
Ex combatiente lucha por volver a ver a su hija tras seis años sin contacto
Ex combatiente lucha por volver a ver a su hija tras seis años sin contacto
La historia de Carlos Tabares está marcada por muchas privaciones, pero hay una que lo desvela. Ex combatiente de Malvinas y prisionero de guerra durante el conflicto bélico, el hombre, que hoy padece una diabetes avanzada, sostiene que el mayor dolor es no poder ver a su hija Milagros.

Nacido en Buenos Aires, tras la guerra, Tabares convirtió a Iguazú en su hogar, se casó y tuvo cinco hijos en la tierra roja, donde afirma haber sido feliz. 

Sin embargo, hace seis años, Tatiana, su hija menor, enfermó y, ante la falta de un diagnóstico certero, quedó al borde de la muerte.
Desesperados, él y su mujer decidieron mudarse a Buenos Aires para que la niña reciba atención médica: “Vendimos la casa y nos fuimos todos para allá. Con el pasar del tiempo, las cosas se complicaron por los gastos que teníamos, entonces mi hija mayor se ofreció a quedarse en la casa de su abuela y hacerse cargo de sus hermanos varones.  Pero no quería cuidar a Milagros porque era muy inquieta y rebelde”, relató.

Ante la falta de recursos económicos, y al no tener con quien dejar a Milagros, el hombre apeló a la solidaridad de su hermana. “Le pedí a mi hermana que vive en Moreno, Buenos Aires, que la cuidara, que nosotros la visitaríamos todos los fines de semana. Ella accedió y yo le firmé un papel para que sea la tutora legal de Mili para que pudiera asistir a la escuela”, agregó. 

Hasta ese momento, las cosas marchaban bien. Tatiana, su hija menor, se recuperó y, en octubre del 2012, la niña obtuvo el alta médica, por lo que la familia regresó a Iguazú. Pero lo hizo sin Milagros, quien debía terminar el ciclo escolar. Sin embargo, un historial de violencia infantil truncó los planes de la familia.

La maestra de la menor descubrió que la niña era brutalmente maltratada por su tía, quien había llegado a quemarle las manos en una hornalla. En ese marco intervino la Defensoría del Menor, que tomó la guarda de la criatura y detuvo a la tía por violencia intrafamiliar.
Desde ese día, sus padres biológicos luchan para volver a tener contacto con ella. Según relataron, en los últimos cinco años han hecho innumerables viajes a Buenos Aires y visitaron diversas dependencias judiciales hasta que lograron obtener datos del paradero de la criatura.

Así, lograron establecer que Milagros está bajo la guarda de una pareja propietaria de una concesionaria del automóviles que busca adoptarla.

“Yo sé que mi hija estará mejor con ellos, le pueden dar todo lo que yo no puedo. Hemos vendido todo para salvar a una hija y en ese camino perdimos a otra, es muy triste lo que nos pasó. Si tan solo hubiese sabido que mi hija era maltratada por mi hermana, las cosas hubiesen sido diferentes. Hoy lo único que queremos es tener contacto con ella, poder verla de vez en cuando. Estoy muy enfermo y lo que quiero es verla antes de morir” expresó entre sollozos.

Luego precisó que la última vez que él y su mujer estuvieron en Buenos Aires supieron por medio de las autoridades del Juzgado de Familia Uno de Mercedes -que entiende en la causa bajo número 13.989- que la niña habría manifestado que quiere ver a sus progenitores, pero no quiere dejar a sus padres del corazón.

Tabares no pierde las esperanzas y manifiesta estar dispuesto a seguir luchando hasta ganar finalmente esta nueva batalla que le presenta la vida.