El sueño del auto propio pasó a convertirse en un calvario
miércoles 09 de octubre de 2019 | 10:57hs.
Ahorristas se autoconvocaron y exigieron que intervenga el Congreso Nacional para atender sus reclamos.
La
devaluación y la pérdida del poder adquisitivo provocaron que los
beneficiarios de planes de ahorros no puedan pagar las cuotas mensuales,
cuyos montos llegaron a cifras muy difíciles de pagar.
Diego Fontana es uno de los damnificados de los planes de ahorro.
Actualmente la cuota mensual de su Ford Ranger se
disparó a 29 mil pesos. Asegura que durante este año, la cuota mes a mes
se fue incrementando en 2 mil pesos. Cuando retiró el vehículo debía
200 mil pesos y actualmente la deuda creció a 348 mil pesos.
"Cada vez estamos más apretados, diría que ya nos llegó la soga al
cuello y al Gobierno Nacional no les interesa nuestros casos", sostiene en diálogo con Acá te lo contamos por Radioactiva.
"Necesitaba un vehículo acorde a dónde ando, en los pueblos, las picadas, las chacras, ya no lo podía hacer en auto chico", dijo Fontana, quien se dedica al servicio de seguridad e higiene laboral recorriendo la provincia.
"Tuve que despedir a uno de mis colaboradores y afrontar
yo esos horarios, trabajo hasta 18 horas para poder tener ese ingreso y
ponerlo en la camioneta. El chico que quedó sin trabajo, lastimosamente por más que quiera
volver a darle no puedo porque todos los meses me suben 2.000 pesos el Plan de Ahorro,
prácticamente estoy con la soga al cuello", relató.
Regularizar el monto, el pedido
"El problema es que si hoy me quiero comprar el mismo vehículo (Ford Ranger), en
cualquier agencia cuesta 1.200.000 pesos y con el Plan Óvalo pago la
camioneta 1.890.00 pesos, es una gran diferencia por eso queremos que
regularicen el monto del vehículo para poder pagar lo mismo que
cualquier persona que quiere adquirirlo hoy", expuso.
En esa línea apuntó que "las concesionarias hacen caso omiso al igual que Defensa al
Consumidor en Misiones, ellos dicen que como es un Plan de Ahorro lo
maneja todo la fábrica, y que ellos simplemente son gestores de este
trámite, el nexo entre el comprador y la fábrica, que se basa en el
precio actual del vehículo, la diferencia es el beneficio para quien lo
va a comprar hoy, no para los que venimos pagando hace tiempo".
También expuso que en el contrato figura un porcentaje de los ingresos en relación al valor de las cuotas, la cual no se respeta. "En mi caso las cuotas en un año subieron un 70 por ciento. Nunca me atrasé, nunca dejé de pagar y debo 380 mil, en un año debo casi el doble", afirmó.
Por último remarcó que en esta situación que afecta a miles de personas, "el Gobierno Nacional mirá
para otro costado. Si todos dejaramos de pagar los planes
automáticamente las fábricas también se verían muy afectadas y van a
empezar a sacar personal, y el perjudicado otra vez es la persona que
todos los meses aporta los impuestos".
"Invertí mis ahorros en un vehículo para seguir trabajando, esos ahorros pasaron a ser calvarios", cerró.
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