El disparo que mató a Antúnez fue ejecutado a muy corta distancia

sábado 16 de mayo de 2020 | 6:00hs.
El disparo que mató a Antúnez fue ejecutado a muy corta distancia
El disparo que mató a Antúnez fue ejecutado a muy corta distancia
Jorge Posdeley

Por Jorge Posdeley fojacero@elterritorio.com.ar

Mientras el ex intendente Arnoldo Schoenfisch (59) experimentó signos de evolución al cumplir sus primeras 24 horas de internación, los investigadores recibieron ayer los primeros informes de la autopsia practicada al cuerpo de su esposa, Faustina Antúnez (56), y aguardan el resultado de otras pericias para avanzar en la causa judicial que tiene al hijo de ambos como único sospechoso del ataque  a balazos perpetrado el jueves a la madrugada en Santiago de Liniers. 
Según consignaron fuentes oficiales, el hombre herido de un tiro en el cráneo continúa con pronóstico reservado pero su estado comenzó a presentar signos de evolución que ilusionan a todos, principalmente a sus familiares pero también a los pesquisas abocados a esclarecer lo sucedido. 
Es que en la víspera desde el hospital Madariaga se emitió un comunicado de prensa en el cual brindaron precisiones sobre el estado de salud del ex jefe comunal de Santiago de Liniers. 
En el informe médico se consignó que el paciente cumplió ayer a la mañana sus primeras 24 horas bajo internación en cuidados intensivos y que se encontraba “lúcido y hemodinámicamente estable”. 
Además, indicaron que el balazo sufrido le afectó severamente los nervios ópticos y como consecuencia de ello presenta una amaurosis bilateral, que es una ceguera transitoria. Producto de este cuadro, al hombre se le hará un seguimiento oftalmológico para atender el caso. Ya el jueves por la noche varias fuentes habían expresado la posibilidad de que una de las secuelas del ataque podría traducirse en la pérdida de la visión. 
Al margen de todo ello, en el parte oficial del Madariaga volvieron a indicar que el paciente continúa con “pronóstico reservado”. 
Schoenfisch ingresó al hospital posadeño el jueves a las 10.30 de la mañana y desde allí permanece bajo intensos cuidados médicos como consecuencia de un disparo calibre 38 sufrido en la cabeza después de un ataque perpetrado, presuntamente, por su hijo Pablo (18). 
Justamente, en ese mismo ataque también fue herida Antúnez, esposa del ex intendente y madre del principal acusado, quien sufrió una lesión idéntica que le terminó provocando la muerte escasos minutos después en el hospital Samic de Eldorado. 

A corta distancia
Una de las primeras diligencias del Juzgado de Instrucción Uno de Eldorado, a cargo del magistrado Roberto Saldaña, fue el envío del cuerpo de la mujer hacia la Morgue Judicial de Posadas para el correspondiente examen de autopsia. 
En este contexto, las fuentes consultadas por El Territorio señalaron que el informe preliminar de la necropsia se conoció ayer a la tarde y el resultado confirmó, entre otras cuestiones, que el disparo provocó orificios de entrada y salida. 
Pero entre los datos más importantes del examen también se desprende que el disparo fue ejecutado a muy corta distancia, a punto tal que el arma hasta pudo haber sido apoyada en la cabeza para gatillar.
Ahora las autoridades están a la espera de conocer los resultados del examen de parafina practicado al joven detenido. Este paso podría ser importante para encaminar la pesquisa, aunque aclararon que el carácter de este estudio no es definitorio si no más bien indiciario u orientativo. 
Bajo este panorama, los voceros consultados indicaron que muy probablemente el muchacho detenido recién pueda ser trasladado ante la Justicia el lunes a primera hora, instancia en la cual tendrá que comparecer en audiencia de declaración indagatoria. 
Si bien es prematuro, con todos los elementos tendidos sobre la mesa hasta el momento, el caso podría configurarse como un “homicidio calificado por el vínculo y homicidio en grado de tentativa calificado por el vínculo”, delito contemplado en el Código Penal y que prevé una pena de prisión perpetua.
Además, a la larga, la Justicia también aguardará por los resultados de otros tantos estudios encomendados a realizar a los peritos de la Policía de Misiones, entre ellos el análisis de varias prendas de cama y de vestir que podrían presentar rastros de sangre. 
De igual forma, todas las esperanzas de los pesquisas están puestas en la recuperación del ex intendente, cuestión clave para que pueda declarar y narrar qué fue lo que sucedió dentro de su vivienda. Su palabra será lo más importante de la pesquisa. 

Madrugada violenta
Tal como publicó este matutino, el hecho ocurrió el jueves, minutos después de las 4, en la vivienda de la pareja ubicada sobre la calle Belgrano de Santiago de Liniers. 
En plena madrugada, Schoenfisch, malherido y ensangrentado, alcanzó a llegar hasta una ventana de su casa y pidió auxilio a los gritos, lo que permitió que un hermano suyo y una cuñada lo socorrieran. 
Cuando los familiares acudieron al lugar constataron que no sólo el hombre había sido herido, sino que también su pareja, Antúnez. Ambos fueron trasladados particularmente hasta el Samic de Eldorado, donde la mujer falleció a los pocos minutos. 
Desde ahí comenzó la investigación del caso que después de varios giros terminó dejando contra las cuerdas al único hijo en común de la pareja, Pablo Schoensfisch (18), quien no vivía con sus padres sino que con una abuela a pocos metros del lugar. 
En un principio se especuló con la posibilidad de un asalto, pero los pesquisas rápidamente descartaron esta teoría al constatar que no había ingresos forzados, desorden ni faltantes de valor en el inmueble. 
A partir de ello trazaron la hipótesis de un femicidio seguido de intento de suicidio, hipótesis que también perdió fuerza cuando los pesquisas reconstruyeron todo lo sucedido durante la madrugada. 
En ese punto tomaron valor las últimas palabras que Schoenfisch alcanzó a decirle a sus familiares antes de perder el conocimiento: “Pablito se mandó una cagada”. 
Después de ello dieron con testigos que aseguraron haber visto al hijo de la pareja salir del lugar durante la madrugada y también supieron de que la relación entre el joven y sus padres se había tornada conflictiva en el último tiempo a raíz de malos comportamientos, desobediencias y demás. 
En medio de las labores policiales incluso el muchacho expresó que él alcanzó a ver a sus padres heridos e incluso tocó el revólver calibre largo 38 utilizado en el ataque, pero después volvió a acostarse a dormir. 
Algunas fuentes incluso señalan que al ser demorado admitió el hecho y hasta dio detalles del mismo al hablar con un policía conocido, declaración que en caso de ser cierta que no tiene validez judicial y debería ser ratificada ante la Justicia.
Desde el jueves, el muchacho fue alojado en la comisaría Tercera de Eldorado, donde aguardará las próximas disposiciones de la Justicia.