De Eldorado a los parajes de Chaco

Pamela Rivero (29) es de Eldorado y por estos días sumó a su historia de vida una experiencia incomparable. Integró el equipo de oftalmólogos voluntarios - de varias provincias- que viajaron a los parajes olvidados de la provincia de Chaco para hacer cirugías gratuitas en el Día Mundial de la Visión, que se celebró el 11 de octubre.
Durante tres días, los médicos solidarios -entre ellos la oftalmóloga eldoradense, que actualmente se desempeña en la Fundación Hugo D. Nano, de San Miguel (Buenos Aires)- se instalaron en Castelli, ciudad conocida como “la puerta del Impenetrable”, para concretar una campaña contra la ceguera.
Fue una cruzada solidaria que estuvo coordinada por la Fundación Nano, la Asociación Chaqueña de Oftalmología y la Fundación Abre los Ojos, de Mendoza.
“En junio me comentan de esta campaña solidaria y si quería participar, dije que sí. Atendimos a personas muy carenciadas y sin acceso a la salud. Fue muy gratificante ayudar a tantas familias. Los controlamos al día siguiente de las cirugía y eran otras personas”, confío la oftalmóloga.
En total recibieron atención 996 pacientes de  Puerto Esperanza y parajes cercanos de Chaco.
“Es muy difícil expresar con palabras lo que siente, mis padres siempre me enseñaron valores con ejemplos y uno de esos valores fue el de ser solidarios y ayudar a quienes están olvidados, por decirlo de alguna manera”, señaló.
La mayoría de los habitantes de los parajes de El Impenetrable no querían dejar sus hogares para viajar a atenderse, porque los obligaba a descuidar sus granjas y huertas, principal sostén de vida.
De hecho, a Mauro, uno de los jóvenes con estrabismo que operaron, tuvieron que llevarlo con una ambulancia en medio del barro, porque llovía, y casi no logra llegar.
“La camioneta se quedó justo antes de donde empieza el asfalto. Si se quedaba antes, no llegaba”, cuenta, por su parte, María Múgica, otra de las oftalmólogas que viajó.

Su carrera
Pamela nació en Corrientes capital, pero desde que cumplió los 3 años vive en la Capital del Trabajo junto a su familia, que está compuesta por su padre, el médico José Luis Rivero, su madre Nélida López, docente,  y su hermano Matías, quien actualmente estudia Medicina.
En una charla con El Territorio, contó que desde pequeña soñó con ser médica, siguiendo el mismo camino de su padre.
Realizó sus estudios primarios y secundarios en la ciudad donde sus padres eligieron vivir desde su corta edad.
A los 17 años, muy convencida del camino a seguir, se mudo a Santo Tomé, Corrientes, donde comenzó la Facultad de Medicina en la Fundación Barceló.
Finalizó sus estudios en 2013 y ya tenía decidido seguir con oftalmología. Fue así que viaja a Buenos Aires para continuar su formación académica profesional.
Ingresó  en la Clínica de Ojos Doctor Nano, donde fueron tres años de residencia, a puro aprendizaje de su especialidad.
La clínica y la microcirugía representan su parte favorita de la Medicina. Gracias a su especialidad y desempeño es que hoy en día puede formar parte del staff de la clínica donde realizó su residencia.
A principios de junio le informaron acerca de la primera parte de la campaña solidaria de cirugías gratuitas en El Impenetrable chaqueño.
En el segundo capítulo se ocuparon de operaciones de cataratas y en la tercera corrigieron casos de estrabismo, afección que consiste en la desviación de uno o ambos ojos y que puede llevar a la pérdida de la visión.
“La cirugía difiere mucho de la de cataratas, que es intraocular y hoy es más ágil gracias a la tecnología. La de estrabismo requiere anestesia total y es más artesanal, por decirlo de algún modo”, sostuvo Múgica.