Crecen las mediaciones por la tierra y las disputas en barrios

Las permanentes intrusiones de tierras fiscales, privadas o espacios públicos y las disputas entre los candidatos de las listas barriales para la conformación de nuevas comisiones vecinales son los conflictos más frecuentes en los que deben intervenir y tratar de resolver los integrantes del área de mediación municipal, una de los sectores más nuevos del municipio capitalino.

Esas dos problemáticas que se presentan en los barrios de la capital provincial, en donde serían alrededor de 150, tienen además una directa relación, teniendo en cuenta que las comisiones vecinales están teniendo cada vez más protagonismo; y precisamente, en los próximos días se concretarán reuniones en los barrios para prevenir y alertar sobre cómo actuar en casos de intrusión.

“Los conflictos que se están abordando son los que tienen que ver con la tierra, nos derivan las situaciones de conflicto que se suceden en los asentamientos, cuando se dan las intrusiones, estamos aplicando una política de colaboración para orientar a los involucrados”, explicó a El Territorio, la titular de la Dirección Jurídica de Mediación Municipal, Laura Mondadori.

“La última situación que estamos atendiendo es por los intrusos del arroyo San José, los que están a la vera de ese arroyo, lo que hacemos, ya que no tienen posibilidad de organizarse en comisión por no ser dueños de nada, es incluirlos en la comisión pro tierra y desde entonces se dialoga y se puede empezar a gestionar la relocalización”, explicó Mondadori, aunque claro, detalló que en esos casos, siempre se comprueba que las familias estén atravesando realmente una situación de emergencia y que al menos hace 10 años viven en esos asentamientos.

Mondadori resaltó que las tareas se fueron sumando a medida que la dirección empezó a resolver distintos escenarios conflictivos, desde que empezó a funcionar en el 2012, cumpliendo las objetivos como los de establecer un filtro de las quejas o reclamos que existen hacia o en distintas secretarías de la Municipalidad.

Días atrás inclusive, para mejorar técnicas y resultados, funcionarios municipales e integrantes de la Policía Comunitaria se reunieron y avanzaron en tareas para afrontar conflictos vecinales desde la prevención y el diálogo.

Incluso, según lo informado, se diagramaron agendas de trabajo en equipo con el fin de concretar actividades en escuelas y el acompañamiento en los foros de seguridad.

“Es un año político y tienen que saber que pueden sucederse distintas situaciones en donde también se mezclan avivados o personas que no están necesitadas como sí los puede haber en otros lugares. El objetivo es que con la mediación y el diálogo, evitar que explote el problema”, detalló la funcionaria municipal.

Por ejemplo, uno de los casos que marcaría la tendencia de los últimos años es lo que sucedió en el 2007, en el barrio San Jorge. Por entonces, los habitantes de una villa de emergencia del barrio y vecinos de Villa Dolores mantuvieron días de tensión y de reuniones con representantes del Iprodha, con el firme objetivo de frenar el traslado del asentamiento irregular conocido popularmente como Villa Cariñito, al predio en donde funcionaba la planta de transmisión de la radio estatal LT 17.

El conflicto por tierras y viviendas se inició cuando los vecinos de Villa Dolores se informaron sobre el inminente traslado de la villa de emergencia a los 50 mil metros cuadrados abandonados desde el traslado de la antena de la radio del Estado provincial, e inmediatamente dieron a conocer el rechazo a la mudanza de éstos sin mayores gastos por parte del Instituto Provincial de Desarrollo Habitacional (Iprodha).

La movilización de los de Villa Dolores alertó a los habitantes de la villa de emergencia del barrio San Jorge, conocida como Bajo Antena. Estos últimos reclamaron ante el Iprodha porque querían ser beneficiarios de las tierras.

De la misma forma se fueron repitiendo casos similares en distintos puntos de Posadas, aunque siempre en las zonas Sur de la ciudad, la que luego se extendería hasta el límite con el municipio de Garupá.

“Es que no todos los vecinos les interesa colaborar o estar en las comisiones, se generan incluso problemas de tipo personal y en eso no nos podemos involucrar, pero se presentan conflictos entre quienes salen y los que entran a conformar nuevas listas, esas son otras situaciones que estamos mediando con más continuidad”, explicó la directora de Mediación Municipal, Laura Mondadori.

Mondadori detalló que, según los casos y los tipos de conflictos, “hasta un año después continúa nuestro seguimiento, no es que pase ese tiempo para llegar a una resolución, en ese punto, debo decir que la mayoría de las personas llegan frente a nosotros muy enojadas y se van tranquilos, conociendo incluso a lo que tienen derecho y qué pueden reclamar o pedir”.

En la lista de las mediaciones más requeridas, luego de los conflictos de tierra y las peleas entre los candidatos salientes o entrantes, se deben enumerar las peleas por los ruidos molestos y las medianeras.