Corona compartida

lunes 23 de marzo de 2020 | 6:00hs.
La cuarentena no sólo nos alejó de amigos, salidas y más. Sino que, en muchos casos, padres e hijos quedaron distanciados.
La cuarentena no sólo nos alejó de amigos, salidas y más. Sino que, en muchos casos, padres e hijos quedaron distanciados.
Agustina Rella

Por Agustina Rella sociedad@elterritorio.com.ar

“Las crisis pulen tu vida, en ellas descubres lo que realmente eres”, dice el ya octogenario Alan Chalmers. Tal como cientos de sabios, dramaturgos y científicos, el británico da cuenta de que en tiempos de apremio, la esencia es lo importante. Por eso, dejando banalidades, rispideces de lado, las familias misioneras se reencuentran en esta cuarentena obligatoria.
Así, los regímenes de contacto y comunicación para padres separados se han adaptado en tiempos de pandemia.
“Ante situaciones de crisis hay que tomar decisiones difíciles, dejar de lado el egoísmo”, arrancó diciendo Marcelo Sussini, coordinador del area jurídica de la Defensoría de los Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes de la Provincia.
En esa línea, ejemplificó que “hay varios progenitores que están separados pero desde la cuarentena están conviviendo para que ambos estén en contacto con los hijos”. “Me consta de varios casos, sería lo ideal”, sumó.
Cabe resaltar que hay distintas formas de moderar visitas entre padres que no conviven, hay regímenes judicializados, acuerdos de partes, sistemas más moderados o flexibles, pero todo contemplando siempre el interés superior del niño.
Por eso en este caso, la defensa de la salud tanto del niño como de quienes lo rodean y la sociedad toda, está ligada al orden público, que se resguarda tras una reclusión consciente, decretada por el jefe de Estado.
Por lo tanto, el sentido común debería primar y tal como se especificó en las primeras horas de confinamiento, el niño debe permanecer estos días con quien tenga habitualmente su centro de vida, su residencia ordinaria.
Pero, siempre buscando el límite, la negación o el escape, puesta la ley, se busca evadirla. Por lo que Sussini reflejó que ya hay fallos donde los padres pedían exceptuarse de la cuarentena para visitar a sus niños y la Justicia les denegó el permiso.
“El interés superior del niño no solo está fijado en el contacto con el otro progenitor. Esa es solo una faceta, el interés superior del niño está ahora fijado en la cuestión del orden público sanitario, la protección de su salud, hay que amalgamar estos conceptos. Porque si estamos llevando al niño de un punto a otro, lo estamos poniendo en una situación de riesgo con respecto a esta pandemia”, insistió el letrado.
En ese marco, ahondó que “la mayoría de los autores llaman a buscar que los adultos entiendan que hay que desarrollar distintas conexiones, comunicarse de otra manera y no forzar a que los niños estén expuestos o nosotros quebrantando la ley impuesta”. Ya que, recordó, no está contemplado en el decreto como exención, las visitas parentales.
Sin embargo, las excepciones se dan en el caso en el que existan situaciones de vulnerabilidad de derechos o violencia. Obviamente no se podrá mantener al pequeño con quien genere una violación a sus derechos, teniendo en cuenta también que a veces la disputa es entre los adultos y el niño queda rehén de la situación.
Finalmente, los padres que deban cumplir tareas esenciales dentro de la sociedad y estén exentos de la cuarentena, también tienen un salvoconducto que les permite dejar al niño, al cuidado de otro tutor.
En definitiva, como en tantos aspectos de la vida, resaltados en este época de guerra viral, la empatía, generosidad, solidaridad son clave. Recordar que así como ese vástago tiene derecho a gozar de la compañía de ambos progenitores, su salud está primero.
Priorizar el ingenio ante el entendimiento, usar la tecnología como aliada en videollamadas para contar cuentos, hacer ejercicio juntos, estudiar o incluso compartir una comida. Obrar con el ejemplo en el cuidado de su salud será el mejor legado. Y por qué no, en ese experimentar una nueva convivencia responsable y amorosa, la familia supere la cuarentena, adquiriendo mucha más salud.