Comercios especulan con los precios y limitan ventas de artículos

En la jornada de ayer, el supermercado El Cóndor, uno de los más importantes de Oberá, sorprendió con la reducción en la venta de paquetes de harina para clientes. En la ocasión, anunciaron que sólo se podían llevar dos kilos por cliente.
Según expusieron los trabajadores de la empresa, se debe a que no saben a qué precio subirá el producto, y para no quedarse sin el producto en góndola, decidieron hacer una venta un poco más reducida al por menor. Mientras, en el sector mayorista se comercializó por packs de 10 kilos.
En el resto del supermercado las ventas fueron normales, por lo que el cliente pudo adquirir artículos sin límites.
“Esto pasó varias veces por ejemplo con el aceite, al no haber precio, te reducen la cantidad por persona y alcanza para todos”, explicó una clienta en diálogo con El Territorio.
También se observó que la empresa hizo un trabajo de remarcado de precios en góndola.
En el caso de Candelaria, por ejemplo, los vecinos se encontraron con la ingrata sorpresa de una importante suba en los artículos comestibles y en algunos casos restricción en volumen de compra en los comercios que decidieron mantener sus puertas abiertas al público.
Por su parte, otros locales optaron cerrar las persianas y en las puertas se podía observar carteles que decían: “Cerrado por balance”.
Los vecinos expusieron que lo llamativo fue que estos comercios nunca antes habían tomado una medida similar.
En tanto, comerciantes consultados indicaron que todo es incertidumbre, pero que “es más seguro que todo seguirá aumentando cuando se haga efectivo el nuevo aumento de los combustibles”.