Cristina pasó por la Rosada y dejó un rosario en el féretro de Maradona
La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner asistió hoy al velatorio de Diego Maradona en la Casa de Gobierno, donde expresó sus condolencias a los familiares y le brindó el último adiós al futbolista, que falleció ayer a los 60 años.
Fernández de Kirchner llegó pasado el mediodía e hizo su ingreso por la entrada de explanada de la Avenida Alem y esquina Rivadavia, desde donde saludó a los hinchas reunidos detrás de las rejas de la Casa Rosada.
La vicepresidenta descendió de un vehículo oficial acompañada por la senadora mendocina Anabel Fernández Sagasti, referente de La Cámpora y quien será la próxima presidenta del PJ de esa provincia.
En el momento en que llegó a la Casa de Gobierno, el presidente Alberto Fernández ya se encontraba allí con una reducida comitiva.
Fernández de Kirchner fue recibida por el ministro del Interior, Eduardo "Wado" De Pedro, y el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, y de inmediato se dirigió al hall donde se dispuso la capilla ardiente.
Acompañada por el Presidente, Fernández de Kirchner saludó y conversó con Claudia Villafañe, la exesposa de Maradona, y con Dalma, Gianinna y Jana, las hijas del futbolista.
A solas en la capilla ardiente, Cristina Fernández colocó un rosario sobre las camisetas que reposaban en el féretro de Maradona y se quedó por unos minutos con sus manos apoyadas sobre el cajón.
Las prendas de indumentaria deportiva que fueron tirando los hinchas y que se amontonaron en el piso apenas rozaron los pies de la vicepresidenta cuando abandonó la capilla ardiente, no sin antes dar unas palmadas al féretro.