Advierten que se registra una disparada en los casos de sífilis

sábado 15 de junio de 2019 | 8:15hs.
María Andrea Silvero Gallardo
María Andrea Silvero Gallardo
Esteban Bueseck

Por Esteban Bueseckinterior@elterritorio.com.ar

Esta semana el Ministerio de Salud y Desarrollo Social de la Nación develó que la tasa de casos de sífilis reportados en el país en varones y mujeres jóvenes y adultos se triplicó entre 2013 y 2017, ya que pasó de 11,7 a 35,2 por cada 100.000 habitantes.
Asimismo, la proporción de positividad en las pruebas de rutina que se realizan a embarazadas pasó del 2% al 3,2% en el mismo lapso en todo el país. En ese marco, El Territorio consultó a María Andrea Silvero Gallardo, médica a cargo del Programa Provincial de VIH/Sida, ITS y Hepatitis Virales de Misiones, que funciona en el hospital Baliña, quien señaló que el NEA está en segundo lugar en notificación de casos luego del Amba (ciudad de Buenos Aires y los siguientes 40 municipios de la provincia de Buenos Aires).
Silvero Gallardo explicó que hay múltiples factores que obedecen a este incremento, pero uno de los principales es el poco uso de preservativos a la hora de tener relaciones sexuales. “Eso se fue sumando que la medicación para el VIH es sumamente efectiva, entonces hoy nosotros hablamos de una enfermedad intransmisible, cuando es indetectable, un paciente enfermo hoy sabe que si toma la medicación no transmite y por eso no se cuida y se mueven en ese contexto otras enfermedades de transmisión sexual, que es algo que se venía previendo que iba a pasar”, aclaró la profesional de la salud.
La sífilis se diagnostica a partir de un análisis de sangre y se trata con penicilina. Los primeros síntomas aparecen 20 días después de que la bacteria entre al organismo y presenta varios estadíos. Por ejemplo, la sífilis primaria o temprana se diagnostica por la presencia del chancro -o llaga-, que se puede ubicar en el pene, ano, vagina o boca.
“Es una úlcera que tiene la característica que no duele y es mucho más visible en el varón; se puede tratar pero es más difícil de hallar. Generalmente lo que se encuentra es sífilis secundaria, que es cuando le hacés un análisis, la prueba treponémica y no treponémica, y aparecen reactivas o aparecen con una lesión en la piel que es como si fuese un rash que se llama roséola sifilítica porque parecen manchas en forma de rositas en todo el cuerpo, sobre todo en las manos y en las plantas de los pies”, detalló.
Otra de las variables es la sífilis terciaria, que aunque es muy rara de ver, produce neurosífilis, “que afecta a nivel neurológico”.

De la madre al bebé
Por otra parte, hizo hincapié en los pasos a seguir luego de encontrar un caso positivo. “Una vez que se detecta el caso se lo trata con penicilina, se colocan de tres a cuatro dosis y se va controlando”, contó.
En ese sentido, expresó que es primordial que las embarazadas se controlen durante la gestación e incluso se apunta a que el hombre acceda a esos mismos chequeos médicos.
“Siempre el cuidado principal que les damos a las embarazadas es que durante el embarazo y la lactancia usen algún método de barrera, porque en ese período es cuando existe posibilidad de transmisión de estas enfermedades; por eso es ideal que la pareja también esté testeada; estamos trabajando en empezar a visibilizar más al varón y que se controle como lo hace la mujer. Y si no logramos ese control para saber si no tiene alguna patología entonces hay que buscar que la embarazada use algún control de barrera durante todo el embarazo y la lactancia”, expuso. Insistió que para el sistema sanitario es primordial “vigilar la sífilis congénita, por eso necesitamos que la embarazada llegue a los controles”. Es que la enfermedad puede propagarse fácilmente de una madre infectada a su bebé en gestación.
En esa línea, el boletín epidemiológico sobre VIH, sida y ETS publicado en diciembre de 2018 mostró un aumento en casos de bebés nacidos con la enfermedad: “En el período 2013-2017 la tasa a nivel nacional muestra un ascenso año a año. Mientras que en 2013 era de 1 caso cada 1.000 nacidos vivos, en 2017 había trepado casi a 1,7”.


35,2%

Los casos de sífilis reportados en el país en varones y mujeres jóvenes y adultos se triplicó entre 2013 y 2017. Pasó de 11,7 a 35,2 por cada 100.000 habitantes.

Alcohol, mitos y falsa sensación de seguridad

Si bien el VIH y la sífilis son enfermedades de denuncia obligatoria al sistema de salud, esta última, al estar más extendida, se notifica de manera agrupada y no nominalizada. En ese mapa sanitario que se hace por región, el NEA “está segundo, pero con mucha diferencia con Amba que se está llevando la mayoría de los casos de sífilis”, expuso la médica María Andrea Silvero Gallardo.
Por otra parte, consultada sobre cuáles son las prácticas de los misioneros a la hora de cuidarse para tener relaciones sexuales, plasmó que la tendencia es dispar y tiene sus particularidades según edades.
Por ejemplo, el adolescente que se inicia “tiene toda la información, tienen el preservativo, saben cómo usarlo, saben lo que previene pero hay otros factores externos, sobre todo las adicciones, que están impactando”.
Sostuvo que hay un consumo de alcohol y drogas desinhibitorias que está “muy generalizado. Entonces los chicos tienen el preservativo pero no lo usan porque no tienen en ese momento de consumo la capacidad de tomar esa decisión”.
Por otro lado, el adulto sexualmente activo, una franja que va hasta los 45 años, “generalmente están en pareja y tienen una falsa sensación de seguridad y piensan que esa pareja estable no tiene ninguna enfermedad o no puede estar con otra persona, entonces el sentirse seguro de eso es como caminar con los ojos cerrados. Siempre propongo de ser sincero con el otro y hacerse los chequeos juntos. Porque a veces pasa que esa pareja inicia una relación estable pero anteriormente tuvieron otras parejas”, dijo.
En tanto el adulto mayor “tiene una actividad sexual distinta, hoy cuentan con un estimulante como lo es el sildenafil (viagra) que permite que sean sexualmente activos”. Con ellos, al contrario de los adolescentes, “no tienen tanta información y lo que manejan respecto a los métodos de barrera son mitos como ‘molesta, aprieta, no siento nada’”.
“Por eso lo que notamos es que los casos de VIH están aumentando en el adolescente y en los adultos mayores por esas dos cuestiones”, remarcó.
Según Salud Pública, durante en 2018 se notificaron en Misiones 184 pacientes nuevos con el virus del VIH, de los cuales 115 son varones y 69 mujeres. Y en la actualidad el sistema público tiene unas 1.000 personas bajo tratamiento a quienes se le hacen los chequeos médicos y se les proporciona la medicación. “Es muy difícil lograr que el sistema privado notifique los casos, los datos que hay es por pacientes que por alguna razón se vieron en el sistema público y eso termina acá”, comentó.
Por último hizo mención a la reunión que tuvieron a principio de mes los referentes provinciales de los programas de ETS. Allí se habló de un aumento en “la proporción entre hombres y mujeres, hasta el año pasado manejabamos dos a uno y ahora hay tres varones infectados por una mujer detectada con VIH”, finalizó.
Según datos los últimos datos nacionales del boletín sobre VIH, alrededor de 5.800 personas son diagnosticadas por año (el 35% de ellas en etapas avanzadas de la infección). Además, la tasa de transmisión perinatal fue del 4%. En el país se estima que hay 129.000 personas viviendo con el virus, aunque el 20% desconoce su situación.