“Tenemos la obligación de construir una alternativa política superadora”

Juan Manuel Urtubey se convirtió en gobernador de Salta en 2007 y desde entonces fue reelecto hasta ahora. Su mandato se extiende hasta el 2019, fecha en que no puede ser reelecto otra vez en su provincia aunque ya en el peronismo -espacio al que pertenece- comienzan a barajar su nombre para competir contra la reelección del presidente Mauricio Macri el año próximo.
Por ahora Urtubey, aclara que no está en campaña, aunque habla como precandidato y deja en claro que se debe concebir un nuevo modelo de país y, para ello, trabajar en un proyecto más amplio que el peronismo. Le reconocen tener vocación y voluntad y, sin largarse abiertamente al ruedo, figura en las encuestas entre los primeros cuatro presidenciables.
Urtubey llegó el viernes último para participar de los actos patrios en Misiones. Fue recibido y luego se reunió con el gobernador Hugo Passalacqua y el vicegobernador, Oscar Herrera Ahuad. Tras participar del acto en Alem, dialogó con El Territorio y se expresó, más que como gobernador, como un dirigente que sabe manejar los tiempos del poder y se muestra contrariado de que en el país se repita la misma receta, esa que nunca dio resultados.

¿Cómo se gobierna una provincia con tantos cambios y en medio de esta crisis?
Trabajar lo más unido posible. Hoy lo planteaba el gobernador Passalacqua en el acto. Fue posible el 25 de mayo porque, a pesar de las diferencias que había entre los miembros, tomaron la decisión de trabajar juntos. En la Argentina hoy hay que hacer eso. Estamos atravesando un momento difícil, si cada uno tira para su lado, vamos a complicar las cosas. Es momento de apretar las filas y tratar -a pesar de que seamos de la oposición- de colaborar para que esto salga bien.

En cuanto a modelos de gestión. ¿En qué se asemejan o diferencian Misiones y Salta?
Misiones tiene una característica muy particular. Tiene una organización modelo de desarrollo político, social, productivo, muy interesante con un gobierno realmente muy proactivo y eso, en definitiva, marca una característica muy particular de esta provincia. Nosotros en Salta, con otra lógica. Culturalmente el Noroeste tiene algunas similitudes y también complejidades diversas.
Entendemos las necesidades del arraigo como lógica de sacar fuerzas de nuestras propias vísceras más íntimas y en ese marco, vivimos una historia común. Lamentablemente -no es cuestión de este gobierno es una cuestión de hace 50 años o más-, la Argentina está cada vez más centralista.

Y con la Nación, ¿cuáles son las coincidencias o diferencias?
El Gobierno, creo con buena intención, sigue repitiendo políticas  que ya sabemos que en la Argentina no dan resultados. Muchas de las cosas que hemos vivido en el último mes, cuántas veces las vivimos los argentinos.  Me parece que la pregunta es, si vas hacer lo mismo, por qué esperar resultados diferentes. Yo no hubiera ido al FMI, creo que había instancias previas.El Gobierno significó un avance en materia de calidad institucional, hay más diálogo y están más abiertos a escuchar. Pero, aparte de eso, creo que hay que poner mucho más énfasis en la gestión.

Le planteó a Macri que él debería realizar ajustes en materia energética...
Sí, porque creo que es muy centralista el debate. La política que se planteó sobre tarifa que se discute en el Congreso prevé la reducción de las tarifas de servicios públicos para los usuarios de Edenor y Edesur nada más. No prevé para el resto de la Argentina.
Y entonces, lo que estoy planteando que la Argentina debe empezar a tener políticas que integren a todos los argentinos y no sólo una parte. Las tarifas de servicios, compuesta por 35% de distribución -que es lo que se está discutiendo-, otro 25% que tiene que ver con impuesto promedio y otro 40% con generación y transporte. Y nadie habla de esto último y es lo que hay que discutir en la Argentina.
Otros de los temas centrales es cómo hacemos para que, así como en Misiones la Provincia discute con los prestadores de energía, lo hagan también en Buenos Aires con Edenor y Edesur.

Las provincias están haciendo esfuerzos en el marco del acuerdo fiscal. ¿Cuál es el gesto que se aguarda del gobierno nacional en este nuevo escenario?
Creo que la Argentina tiene que caminar hacia el equilibrio fiscal. Sin lugar a dudas, hay que poner énfasis en eso. Estoy de acuerdo. Hay que trabajar fuertemente para no asfixiar la actividad productiva porque si creemos que la receta es enfriar la economía y que haya menos circulantes -que es lo que está pasando hoy en la Argentina- y esto ya lo probamos y salió mal en el país.
Entonces, me parece que lo que tenemos que hacer es colaborar para acelerar la producción de bienes en el país, para que esa mayor producción alcance a la demanda y podamos equilibrar, o por lo menos atenuar el déficit de balanza comercial que está generando problemas serios. Creo que hay que trabajar en una salida más integral, que lo estrictamente monetario que está trabajando  el gobierno.

Usted fue presidente del PJ en su provincia. ¿Qué opina de la intervención del partido, sobre la que se opuso ahora un fiscal?
Nuestro partido casi estuvo más tiempo intervenido que normalizado. Para nosotros no tiene tanto dramatismo. Siempre sería mejor que esté normalizado pero no es lo que sucede. Veremos qué resuelve la Justicia, pero para mí el problema más serio -más allá de la cuestión institucional-, es que el Partido Justicialista vive una fuerte crisis de identidad. Porque no tenemos claro qué es lo queremos hacer, qué es lo que queremos ser y a dónde vamos.
Entonces yo estoy trabajando para que por lo menos un sector de nuestro partido pueda tener una posición definida, clara, frente a la gente, mirando el futuro. Planteando una fuerte renovación de la política y abriendo nuestro espacio a conversar con muchas fuerzas que no son del peronismo  pero que tienen que ver con una mirada fuertemente federal, como lo es la situación de Misiones, Santiago del Estero, Neuquén y muchos otros espacios en el país.

¿Siente que además de colaborar y ayudar a la Nación es necesario ir gestando otro modelo de Nación?
Son dos tareas que tienen que convivir y ser paralelas. Porque por un lado está la responsabilidad institucional, hay que ayudar para que a la Argentina le vaya bien. Punto dos, nosotros tenemos una responsabilidad política como espacio de la oposición, no sólo el peronismo sino las otras fuerzas también. Tenemos la obligación de construir una alternativa política superadora porque la democracia no puede ser de pensamiento único. No podemos hacer que todos piensen lo mismo y decir lo mismo. Tenemos que plantear alternativas y ese es nuestro deber.

¿Siente que a partir de esta nueva realidad en el país se abrió más el juego para el PJ?
Hemos visto que las encuestas les son favorables como también a otros dirigentes.
Creo que son vaivenes. Ni hay que deprimirse cuando la encuesta dice una cosa, ni sobreexitarse cuando dice otra. Creo que hay que construir a mediano plazo, con una mirada estratégica de cómo hacemos para tener una Argentina competitiva, federal, fuertemente productiva y después vendrán los resultados. Porque la gente a medida que vaya acercándose el tiempo (electoral) va a tratar de ir a buscar alternativas y habrá otro que dirá que quiere seguir como estamos. 

Tenemos entendido que está recibiendo asesoramiento para su candidatura presidencial...
Sí, pero hoy tengo el foco puesto en colaborar en la construcción de una alternativa que creo que tiene que ser más amplia que el partido Justicialista. Generar una cosa más amplia. Segundo generar que lo más amplio, sea más propositiva y le diga a la gente lo que nosotros queremos para la Argentina. El tercer paso, será discutir quiénes son los candidatos más competitivos. Me parece que para ese paso todavía falta. 

Por Antonio Villalba
avillalba@elterritorio.com.ar