Superó su adicción al alcohol y las drogas gracias a la contención escolar

domingo 19 de agosto de 2018 | 8:00hs.
Superó su adicción al alcohol y las drogas gracias a la contención escolar
Superó su adicción al alcohol y las drogas gracias a la contención escolar
Josué Giménez (29) dejó a su familia en Formosa y partió rumbo a Misiones para visitar a un amigo que vivía en San Pedro. El almanaque avanzó y el hombre frustrado por un viaje al sur que quedó trunco y la falta de oportunidades laborales; y profundamente afectado por la soledad terminó incurriendo en el alcohol y las drogas. Cuando sintió que ese camino lo llevaría a la muerte, logró reaccionar y con la ayuda de sus compañeros y docentes de la Escuela para adultos CEP 34 transformó su presente en un futuro plagado de objetivos y un mensaje que transmitir.
El caso de Josué es similar al de ciento de jóvenes y adolescentes que abandonan la escuela para trabajar por necesidad. Sin embargo, la falta de preparación profesional y de contención familiar lo llevaron a abandonar su meta. Con el objetivo de concientizar, Giménez accedió a una entrevista con El Territorio, en la que contó su dura experiencia con las drogas, a las que según afirmó accedió de forma muy fácil en la capital de la Araucaria.
“Yo pasé por una situación sentimental muy difícil cuando me separé de mi pareja, luego el dolor y la tristeza me hicieron caer en ese lado oscuro, pero cada día la insatisfacción era mayor, así como el consumo. Vendí todo lo que tenía para poder comprar, no salía, mi humor, mis ganas de hacer las cosas se estaban consumiendo y hasta pensé en quitarme la vida, me volví violento, cosa que nunca compartí”, reveló Josué.
Durante ese período el hombre dejó la escuela para adultos que había retomado después de varios años de haber culminado en su provincia el polimodal.
Pese a no haber compartido con nadie su dura realidad, sus compañeros se enteraron y decidieron ayudarlo a superar sus adicciones. “Un día estaba muy mal, ya no tenía nada, la droga se estaba apoderando de mis sentidos, fue cuando le hablé a Dios y le dije que me diera otra salida, y vinieron mis amigos de la escuela, a animarme, a continuar y desde ese momento me aferré a Dios y a la escuela. Fue muy difícil, los primeros días requieren de un esfuerzo inmenso para desintoxicarse”, resaltó el hombre.
En ese marco, los estudiantes, alumnos, profesores y el propio director del CEP 34 le brindaron apoyo y contención y lo ayudaron a retomar los estudios y conseguir un trabajo. Enfocado en su futuro, el ahora estudiante confesó que quiere culminar el nivel secundario y ya sueña con cursar una carrera terciaria. Asimismo, durante el día se desempeña como asistente de albañil.
Giménez además forma parte del programa provincial “No más violencia, va a la escuela”, que desde el 2013 realiza una serie de charlas en los establecimientos educativos a fin de prevenir la violencia, el abuso, la deserción escolar y el consumo de drogas en los jóvenes misioneros.
A través de su testimonio de vida, el hombre busca concientizar a los adolescentes sobre la importancia de tener una red de contención para enfrentar los problemas, así como la posibilidad de superar una adicción.“Para mí esta escuela hoy es mi familia. Me gusta la familia, porque a pesar de las dificultades la familia se siente, se preocupa, te da batalla para que te superes, y eso hoy día lo tengo acá. Agradezco infinitamente las cosas que puedo vivir en este colegio que es mi fuente de energía y a todos les digo que hay que hablar, buscar una persona y contar lo que te está pasando, no callar, no guardar porque hace mal”, apuntó.