El cigarrillos como trasfondo y los crímenes que anteceden al de Caytano

La localidad de Bernardo de Irigoyen parece estar tristemente acostumbrada a los hechos de tinte mafioso. Lejos o cerca de los negocios ilegales, ya no hay sorpresa cuando un asesino o varios asesinos a sueldo irrumpen en la cotidianidad y dejan sangre, lágrimas e impunidad. Esto, claro, no tiene que ver con una resignación: quieren el fin de la violencia. Justicia y tranquilidad.

El homicidio de César Caytano (23) el pasado jueves es el séptimo a manos de sicarios desde el 2020 y se suma a la lista que conforma su propio padrastro Lindomar De Olivera Cunha (40) en 2023; Carla Betiana De Olivera (37) y Sebastián “Chany” Fernández Da Rosa (42) en 2022; Juan María López (50) y Rafael Antúnez de Olivera (45) en 2021 y Diego Armando Jara (40) en 2020.

En todos los casos se investiga un trasfondo ligado al contrabando y en ese contexto la cantidad de muertes asciende. En abril de 2022 Diego Pimentel (31) fue acribillado por Adilson Zang (34), quien está bajo sospecha de haber tenido que ver con la desaparición Maximiliano Pimentel (24) -primo de Diego- de quien nada se sabe desde principios de aquel mes y no hay esperanzas de hallarlo con vida.

El padrastro de Caytano fue asesinado en mayo del año pasado.

Menos claro es el caso de Ariel Camargo de Lara (19), quien fue asesinado de un disparo en la cabeza, después enterrado en una zona rural del paraje San Roque en febrero del 2022. Era sobrino de Walter de Lara, narco condenado por tráfico de drogas que había recuperado la libertad poco tiempo antes.

Por el caso está detenido un primo del joven y buscan a un brasileño. Se reconstruyó que los asesinos lo llevaron a un lugar alejado mediante engaños y le dijeron que una cubierta se había pinchado, solicitándole a la víctima que se baje a ver. En ese momento le descerrajaron un tiro por la espalda.

Para completar el panorama desolador hay que recordar que las investigaciones por todos estos casos han arrojado un total de dos detenidos -ningún asesino a sueldo-, recordando que Zang se entregó a la Policía de Misiones e insiste en que solamente se defendió de Pimentel, quien había llegado armado a su casa y lo golpeó varias veces.

Caytano

Si bien la mayoría de los hechos estuvieron ligados al comercio ilegal transfronterizo de vinos, en el caso de Caytano la principal hipótesis habla del contrabando de cigarrillos, un producto por el cual hubo varias incautaciones en el último tiempo por parte de Gendarmería Nacional en la zona.

Generalmente las organizaciones de contrabandistas ingresan la mercadería desde Paraguay, mayormente por Eldorado, y desde ahí van hacia la frontera para después venderlos a Brasil.

El joven acribillado fue relacionado directamente con esta actividad y se habla de una deuda, aunque las versiones de si era deudor o acreedor son dispares. Fuentes de la fuerza federal mencionaron que en el pasado “perdió cargas” y especularon que el final podría estar relacionado a eso.

El homicidio ocurrió poco antes de las 21 del jueves y quedó registrado en cámaras de seguridad del barrio Vista Alegre, donde se vio que la víctima estaba con el dueño de casa. En la impactante escena se puede observar que tres personas de apariencia jóvenes llegaron al lugar con capuchas y fueron directo hacia el joven para disparar sin que pudiera tener algún tipo de reacción.

Sólo uno de ellos accionó el arma y se fueron del lugar rápidamente, sin importarle el acompañante y dueño de casa, que obviamente huyó del sitio cuando los vio ingresando al patio. La víctima murió en el acto y quedó tendida en la silleta en la que estaba.

Lo que se sabe hasta el momento es que el trío de homicidas tenía aparentemente un acento portuñol, que es muy típico de la zona. Se movilizaban en un vehículo Volkswagen Golf color claro, que fue localizado cerca de las escena y se descubrió que tenía una patente de otro coche.

Los efectivos locales de la Policía de Misiones fueron advertidos sobre el hecho poco después de las 21 y cuando llegaron al lugar ya no había nada que hacer. Quienes intervinieron determinaron en primera instancia que Caytano habría recibido al menos nueve disparos de un arma 9 milímetros.

Los efectivos de la dirección de Criminalística de la Unidad Regional XII incautaron seis vainas servidas calibre 9 milímetros y otro proyectil deformado. Además se secuestró el coche mencionado y dinero en efectivo que tenía la víctima, cuyo monto ayer no trascendió.

Luego de la correspondiente autopsia, el cuerpo fue entregado a sus familiares para velorio e inhumación.

En cifras

10

Se trata del décimo homicidio ligado al contrabando desde el 2020. De esta lista el primero fue el de Diego Jara, acribillado en su casa el 23 de febrero.