Miembro de la facción criminal 'Bala Na Cara' fue extraditado a Brasil tras casi 6 años preso en Argentina
Carlos Eduardo Reinicke, un peligroso criminal brasileño de 42 años, fue extraditado a Brasil casi 6 años después de su detención y tras haber sido condenado a 8 años de prisión por un intento de asalto tipo comando a la Unidad Penal II de Oberá, a fines de julio de 2018. El operativo de extradición, que se concretó con reforzadas medidas de seguridad, tuvo lugar esta mañana y la caravana partió de la Unidad Penal VI de Miguel Lanús (Posadas) hasta el paso fronterizo entre Puerto Iguazú y Foz do Iguazú.
Reinicke estaba alojado bajo la órbita del Servicio Penitenciario de Misiones y es señalado como parte fundamental del grupo narcocriminal brasileño 'Bala Na Cara'. Esta banda estuvo detrás del recordado asalto comando a la unidad penitenciaria obereña, de donde intentaron rescatar a uno de los cabecillas, aunque sin éxito por la oportuna intervención de un sereno que custodiaba una obra en el área.
"El operativo en conjunto entre Gendarmería Nacional, Policía Federal, Policía de Misiones y Servicio Penitenciario Provincial se realizó bajo formalidades de práctica y estricto protocolo de bioseguridad", informó el SPP en un reciente comunicado, destacando que se desarrolló "sin inconvenientes teniendo en cuenta las características del interno".
Asalto fallido y condena
Reinicke es un criminal de alto perfil y peligrosidad. Este brasileño nacido en Vera Cruz, estado de Rio Grande do Sul, había sido apresado el 31 de julio de 2018 mientras caminaba sobre la avenida Italia de Oberá, intentando escapar luego del intento fallido de asalto comando en el penal obereño, de donde trató de rescatar a otro sindicado peso pesado de 'Bala Na Cara': Vanderlei "Vando" Lopes, detenido seis meses antes junto a su hermano, Rudinei (alias Gordo), en El Soberbio.
En octubre de 2022, previo al debate oral, el criminal se inclinó por un juicio abreviado en el que admitió sus responsabilidades penales y recibió una condena de 8 años de prisión por los delitos de "robo calificado por el uso de arma de fuego en despoblado y en banda, privación ilegal de la libertad calificada por haber sido cometido con violencia agravada y por el uso de arma de fuego y favorecimiento de la evasión de una persona detenida, en grado de tentativa".
Junto a Reinicke habían actuado otros dos sujetos que en su momento fueron detenidos y posteriormente liberados, aunque ligados al expediente, pero desde aquel momento los dos están en rebeldía y no los encuentran.
Los hermanos Lopes
Los hermanos Lopes, Rudinei, alias Gordo y Vanderlei, alias Vando, luego de una larga estadía en cárceles misioneras fueron extraditados a Brasil en 2020. Por seguridad, fueron entregados a la Policía del vecino país de a uno.
Habían sido detenidos en el paraje El Botón, de El Soberbio, en noviembre del 2017 con un arsenal imponente entre armas de fuego, municiones de grueso calibre y explosivos. Al parecer, estaban huyendo. Poco tiempo antes, en junio de ese año, Vando fue rescatado del Presidio Estadual de Lajeado, a 400 kilómetros de allí. El operativo incluyó la emboscada de un vehículo en el que era trasladado a asistencia médica por una supuesta dolencia.
La estadía de los hermanos en Misiones generó muchos dolores de cabeza. El 30 de julio del 2018, un grupo de brasileños liderados por Reinicke secuestró a un remisero en Oberá y llegó a la cárcel local con armas y dispuestos a liberarlos. Los planes se vieron frustrados debido a que se toparon con el sereno de una obra en construcción al lado del presidio quien se resistió con una picana y gritó fuerte por su vida y para dar aviso a los guardias.
Los hombres desistieron y huyeron a los tiros del lugar. Al día siguiente fue detenido Reinicke y fuentes policiales confirmaron que pertenecía a 'Bala Na Cara'. Tenía pedido de captura por haberse fugado de una cárcel, donde cumplía condena por más de una decena de asaltos.
Bala Na Cara en Misiones
La organización 'Bala Na Cara' es la más cercana a Misiones de las bandas criminales brasileñas, ya que se originó en el sur de Brasil y muchos de sus cabecillas son de Porto Alegre. Se dedican principalmente a los asaltos, son expertos en el uso de explosivos y armas, pero sus negocios también incluyen el narcotráfico.
El nombre tiene distintos significados según diferentes publicaciones que se han hecho sobre ellos. Uno asegura que los integrantes rematan a su víctima en la cara para que se sepa quien cometió el homicidio. En el mismo sentido, se cree que se hace para destruir el rostro del objetivo y que así no se lo puede velar a cajón abierto.
Todas describen lo sanguinarios y peligrosos que son. Ya han cruzado las fronteras y desde más o menos 2015 también están instalados en Paraguay para hacerse su lugar en el negocio de las drogas con epicentro en Pedro Juan Caballero. Varios de sus líderes han caído en distintas partes de ese país, lo que demuestra su presencia.
La facción criminal tiene estrechas relaciones con Néstor Fabián Rojas, el narco acusado de tres homicidios en Misiones, quien desde la cárcel de Ezeiza planeo el asesinato del juez posadeño Fernando Verón y creó el Primer Comando de Frontera (PCF), que traficaba estupefacientes desde Paraguay a Brasil y Buenos Aires.
Justamente los compradores eran 'Bala Na Cara', según determinó la investigación de Gendarmería Nacional y la Justicia Federal en su contra. Antes de las restricciones por el avance del coronavirus, la mercadería salía por Santo Tomé y terminaba casi siempre en Porto Alegre, después las rutas de salida fueron generalmente las localidades misioneras de Panambí o San Javier. Un detalle: 'Bala Na Cara' exigía droga premium, de máxima pureza.
