El joven estaba detenido desde el pasado 5 de octubre
Pidieron justicia en San José por el joven hallado sin vida en una celda
Familiares, amigos y vecinos se manifestaron en reclamo de respuestas por la muerte de Exequiel Barbosa (23). “Queremos saber qué pasó”, manifestó su hermana

Familiares, amigos y vecinos de Exequiel Barbosa (23), el joven de la localidad de San José que fue encontrado sin vida el pasado 17 de octubre en una celda de la Comisaría Primera de esa localidad tras haber sido detenido por “resistencia a la autoridad” 12 días antes, marcharon de forma pacífica en la mañana de ayer para reclamar justicia y pedir respuestas sobre la causa de muerte de la víctima.
La convocatoria que comenzó a las 8, contó con cientos de personas que sostenían carteles que además de pedir justicia por Exequiel, reclamaban “basta de maltrato” por parte de la autoridad. Lo último, sosteniendo que si bien la autopsia determinó que Barbosa falleció “de forma natural”, esto no es veraz. Sino que el accionar de la policía pudo haber influenciado su muerte.
“Creemos que hubo abandono de persona y hasta ahora no sabemos nada. Por eso marchamos”, expresó Tamara -hermana de Exequiel-, en diálogo con El Territorio.
A su vez, indicó que “cuando fui a preguntar por qué lo habían detenido sólo me dijeron que fue por resistencia a la autoridad. Pero no me respondieron mucho”.
“Nosotros nos enteramos por llamada que mi hermano estaba muerto, cuando nuestra abogada les llamó y le contestaron que hubo un problema y que Exequiel amaneció muerto”, lamentó Tamara.
Por otra parte, contó que se enteraron que Exequiel fue detenido el pasado 5 de octubre, al darse cuenta que no volvía a su casa. “No nos informaron nada que él estaba ahí”, contó.
En esa línea, manifestó que cuando su padre fue al día siguiente a verlo, notó que la víctima tenía morado uno de sus ojos. Por lo que consultó ante los efectivos qué había pasado, pero “no le respondieron y le dijeron que estaba en contra de la autoridad y que era atrevido”.
Luego de ese cruce, siempre según lo dicho por la entrevistada, pasó una semana. Durante esos días los familiares le llevaban comida pero observaron que por alguna razón Exequiel no estaba comiendo.
En otro tramo de la entrevista, la joven mencionó que “el sábado 14 a la mañana, golpearon la casa de mi papá y le dijeron que mi hermano quería hablar con él”, agregando que “los policías le dijeron que lo habían llevado al hospital y lo medicaron con algo que en lugar de hacerle bien, lo dejó nervioso”.
En ese contexto, señaló que “cuando mi papá fue a verlo, vio que mi hermano estaba mal. Toda esa semana durmió en el piso, pasó frío, calor, humedad porque llovía”.
Además, explicó que en ese momento cuando su papá quiso levantarlo para vestirlo y llevarlo al hospital, el joven de 23 años “no quería ir con los policías, hasta que mi papá le convenció”.
Al llegar, Barbosa recibió tres inyecciones, mientras que la médica “le dio una caja de ampolla a uno de los policías para que le inyecten a mi hermano, si se ponía de nuevo en esa situación. ¿En qué cabeza cabe que le den a una persona que no está capacitada aplicar medicamentos fuertes?”, remarcó Tamara.
“Queremos saber por qué lo tenían incomunicado, porque todo lo que hicieron estuvo mal. Con mi hermano hicieron abandono de persona y la muerte de él tiene responsables. Ahora vamos a movernos para saber la verdad”, ratificó la entrevistada, quien fue una de las manifestantes que pidió respuestas y sostuvo que hubo tortura, una detención arbitraria e ilegal, como también negación de la asistencia médica a Exequiel.
Por otra parte, fuentes consultadas mencionaron que además de los peritajes realizados por el personal de Gendarmería, colaboró con la querella integrantes de la Comisión de Prevención de la Tortura, quienes dialogaron con autoridades policiales y del juzgado, entrevistaron a los detenidos y pidieron resultados de la autopsia realizada.