“Hay un error conceptual, no se puede privatizar una institución”

En el caso de ganar las elecciones presidenciales, Javier Milei advirtió que privatizaría el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet), cuestionando la productividad de sus trabajadores. “Que los científicos se ganen la plata en el sector privado como la gana la gente de bien”, declaró el candidato de La Libertad Avanza. En medio de la polémica, investigadores y científicos mostraron su oposición a la propuesta.

Actualmente, la actividad del Conicet se desarrolla en cuatro grandes áreas del conocimiento: ciencias agrarias, ingeniería y de materiales; ciencias biológicas y de la salud; ciencias exactas y naturales; ciencias sociales y humanidades. Sus objetivos son fomentar y financiar la investigación científica y tecnológica, como también las actividades de apoyo.

“Estamos en un proceso de elección y es lo más honesto que todos los candidatos digan lo que piensan a hacer. De ahí tenemos la responsabilidad de ver qué camino tomar. Mi opinión tiene un sesgo y obviamente no estoy de acuerdo”, sopesó el investigador del Conicet Julián Ferreras, en diálogo con Acá te lo contamos por Radioactiva 100.7

 “Más allá de la posición personal, hay un error conceptual porque no se puede privatizar una institución, no es una empresa pública como Aerolíneas”, agregó.

A su vez, consideró que la preocupación recae en que finalmente haya una población que apoye estas propuestas de candidatura. “Llegado el caso de que llegue al gobierno y se concrete, si no llegamos como comunidad a comprender qué hace una ciencia nacional, tenemos problemas mucho más serios. Como Conicet, habremos fallado en poder comunicar en forma efectiva la importancia de la ciencia y de lo que hacemos”, profundizó.

 Asimismo, se refirió a los profesionales que deciden irse del país. “Hay que enfocarnos en que haya condiciones para que el que quiera quedarse o el que quiera volver pueda desarrollar ciencias de calidad y competitivas a nivel internacional. El problema no es que los científicos se vayan, sino que no hay condiciones para que vuelvan o para el que quiere desarrollar toda la carrera acá”, analizó Ferreras.

“No soy de Misiones pero hice la carrera acá y mi interés era poder contribuir a desarrollar la ciencia localmente. Desde hace trece años tratamos de generar condiciones e infraestructura para radicar a más científicos”, dijo.

 “Para mí es muy importante que la ciencia sea parte del discurso público, del día a día de la comunidad. La ciencia tiene su parte privada, pero también es necesaria la pública porque hacemos cosas diferentes y complementarias”, remarcó.

 En este sentido, afirmó que “son necesarios ambos mundos”.

 “El público, que se hace a partir del Estado, puede hacer investigaciones más básicas y de mayor riesgo, pero para hacer productos comerciales basados en la ciencia hay un costo alto”, explicó.

 “Desde el proceso inicial de una investigación hasta el desarrollo de un antibiótico que aparezca en la farmacia pueden pasar quince años y lleva miles de millones de dólares; los que tienen la capacidad para financiar eso son las empresas. Los sistemas se complementan porque para una empresa es muy costoso el proceso inicial de investigación, donde es altísimo el riesgo a fallar”, ahondó.

 Un claro ejemplo de esta complementación entre sectores por medio de la ciencia se dio durante la pandemia de Covid-19. El investigador del Conicet tuvo en cuenta que “fueron un montón de asociaciones públicas y privadas a nivel mundial, con recursos y capacidades de los privados para desarrollar vacunas, pero el Estado tiene que estar para orientar las investigaciones a priori, económicamente viables”.

 Por último, reflexionó que no está mal replantear y evaluar qué se hace como institución pública, como el caso del Conicet, siempre y cuando sea desde una discusión profunda y con una visión de modelo de país a largo plazo.