Mar de urgencias y un futuro dudoso

La foto con el rostro de una mujer cubierto de microplásticos y hemorragia nasal como símbolo del daño que produce la contaminación en los mares es una de las imágenes elegidas por los manifestantes que se dieron cita en Lisboa, la capital de Portugal, para denunciar, entre otros males, cómo los microplásticos producidos al transformar los oceános en vertederos indiscriminados vuelven en forma de alimentos a las mesas de los habitantes del planeta. La Conferencia sobre los Océanos de la ONU espera encontrar un acuerdo entre los 142 países participantes para resolver esta alarmante realidad.