Se abstuvo de declarar el policía obereño que atropelló, mató y escapó

jueves 21 de enero de 2021 | 0:05hs.
Policiales
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El sargento ayudante Juan M. (45) se abstuvo de declarar ayer en el marco de la causa que lo investiga por su responsabilidad en el siniestro vial que se cobró la vida de Alberto Rafael Ferreyra (48), registrado el último viernes en Oberá.

El implicado, quien desde enero del año pasado se halla en disponibilidad en la fuerza por otra causa penal, permanece detenido en la Seccional Quinta y en la víspera fue trasladado hasta el Juzgado de Instrucción Uno, ocasión en la que designó su defensa y fue notificado de la acusación que pesa en su contra. Luego guardó silencio.

Si bien preventivamente el expediente fue caratulado como “homicidio doloso”, ya que el policía conducía bajo los efectos del alcohol, huyó de la escena y el vehículo que manejaba no poseía seguro, ayer fue imputado por “homicidio el accidente de tránsito y abandono de persona”.

Según averiguó El Territorio, el juzgado interviniente apoyó la acusación en los artículos 84 bis y 106 del Código Penal, lo que complicó la situación del acusado.

El artículo 84 bis establece penas de 2 a 5 años de cárcel para quien conduzca de “manera imprudente, negligente o antirreglamentaria (por ejemplo sin seguro) y cause la muerte de otra persona; pero la pena aumenta 3 a 6 años si el conductor se da a la fuga, no intenta socorrer a la víctima o está bajo los efectos de estupefacientes o alcohol.

En tanto, el artículo 106 indica: “El que pusiere en peligro la vida o la salud de otro, sea colocándolo en situación de desamparo, sea abandonando a su suerte a una persona incapaz de valerse y a la que deba mantener o cuidar o a la que el mismo autor haya incapacitado, será reprimido con prisión de 2 a 6 años”.

Borracho y sin seguro

El siniestro vial se registró minutos antes de las 19 del último viernes en la intersección de las calles Tierra del Fuego y Estanislao del Campo, en el barrio Loma Porá de Oberá. Ferreyra manejaba una moto de 150 cilindradas y falleció prácticamente en el acto.

Por su parte, el conductor conducía una camioneta Volkswagen Amarok y, lejos de asistir a la víctima, abandonó el lugar del hecho a toda velocidad.

De todas formas, su accionar quedó registrado en las cámaras de seguridad de la zona. Así comenzó la investigación que derivó en su detención, pasadas las 20.30 del viernes, en el barrio 40 Viviendas, donde también se procedió al secuestro de la camioneta.

En primera instancia el policía implicado fue trasladado a la Seccional Segunda, donde se negó a que le practiquen el análisis de alcoholemia, por lo que legalmente se determinó que conducía bajo los efectos del alcohol.

“Si el conductor se niega al test, se da por hecho que está alcoholizado. La normativa es taxativa en tal sentido, ya que de lo contrario no tendría razón de ser. Además, según lo que relataron sus camaradas que lo detuvieron, era evidente que estaba alcoholizado”, puntualizó una fuente.

En consecuencia, el imputado quedó alojado en la Seccional Quinta, dependencia que cuenta con un sector destinado a integrantes de las fuerzas de seguridad.

En tanto, se prevé que en las próximas horas su defensa presente un pedido de excarcelación, beneficio que sería poco probable habida cuenta sus antecedentes penales.

Grave antecedente

Vale recordar que el 22 de abril del año pasado, el mismo policía fue excarcelado mediante caución tras permanecer detenido por 96 días como sospechoso de la presunta comisión de los delitos de cohecho, extorsión, incumplimiento de los deberes de funcionario público y abuso sexual en perjuicio de internas de la Seccional Segunda.

Además, afronta una causa paralela por infracción a la ley de estupefacientes en el Juzgado  Federal de Oberá, ya que en el allanamiento a la citada dependencia hallaron picadura de marihuana en el casillero de guardia del mismo policía.

A consecuencia de aquel escándalo, la Jefatura de la Policía de Misiones ordenó su pase a disponibilidad, es decir la suspensión transitoria -que sigue vigente- hasta que la justicia defina la situación penal del imputado.

En tanto, si bien hace un año que dejó de cumplir funciones en la fuerza por hallarse en disponibilidad, siguió percibiendo el 60 por ciento de su sueldo, como indica el reglamento institucional.

Dicha causa se viene tramitando con extrema lentitud ya que el Juzgado de Instrucción Uno no cuenta con juez natural y se suceden las subrogaciones, puesto que Alba Kunzmann de Gauchat inició sus trámites de jubilación.

Al mismo tiempo, las restricciones por la pandemia limitan el accionar judicial y en los últimos meses las actuaciones se redujeron a resolver pedidos de excarcelación, por lo que aún está pendiente la declaración de testigos.

En este punto, un hecho no menor indica que de las siete mujeres que estaban detenidas en la Seccional Segunda y apuntaron al policía, cinco ya recuperaron la libertad y la mayoría estaba privada de su libertad por causas federales, por lo que varias de ellas ni siquiera residen en la provincia.

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