Para sacar la producción, para crear vínculos económicos con otros países, para exportar granos, yerba, y todo lo que se cultiva en Misiones, el puerto de Posadas se alza como la opción más rentable y concreta, junto al de Santa Ana.
Es por eso que empresarios y productores celebran la firma del acuerdo marco firmado ayer entre la provincia de Misiones y la  Compañía Argentina de Servicios Portuarios SA. (Casport), que sería la encargada de operar la salida fluvial.
De acuerdo a lo que estiman desde la misma empresa, en menos de seis meses el puerto de la capital provincial ya estaría funcionando.
Esta rúbrica llega luego de al menos dos intentos fallidos de convocatoria a licitación pública, en las cuales las empresas que se presentaban no llegaban a completar todos los requisitos solicitados por  la Administración Portuaria de la provincia (Ver “Dos licitaciones...”).
No obstante, según argumentaron desde la misma administración, esta minuciosidad responde a la relevancia que tendrá dicho puerto ante los países limítrofes y las uniones transoceánicas encaradas por empresarios y gobernantes de Misiones.
No es menor resaltar que las autoridades comunales de Misiones albergan la esperanza de que la reactivación del puerto de Posadas produzca un efecto derrame en los demás embarcaderos de la provincia. 

La firma
El gobernador Hugo Passalacqua asistió ayer a la firma del acta de intención que sellaron la Administración Portuaria de Posadas y de Santa Ana (Appsa) a cargo de Luis Lichowski y la Compañía Argentina de Servicios Portuarios SA, presidida por Germán Guzzini. La empresa es de la provincia de Buenos Aires y trabaja en cooperación con otras firmas del sector, nacionales y extranjeras.
El documento constituye una “manifestación de interés no vinculante, sujeta a términos y condiciones específicos, para la eventual futura adjudicación de la concesión integral del desarrollo y la operación del Puerto Multipropósito de Posadas y/o del Puerto de graneles sólidos/líquidos y cargas generales de Santa Ana”.
En los considerandos del acta se deja constancia de que “el desarrollo portuario ocupa un lugar privilegiado entre las prioridades del Gobierno de la provincia de Misiones, en el marco de las políticas públicas a implementar, con miras a potenciar la eficiencia de los recursos públicos, reducir los costos de transporte, mejorar los costos logísticos y generar mayor competitividad para los bienes de producción local y regional, dinamizando el desarrollo industrial local y generando nuevos empleos genuinos”.
En cuanto a la empresa que manifiesta su interés de invertir en los dos puertos, cuya habilitación se prevé para dentro de pocos meses, sostiene que “Casport manifiesta su interés a los fines de acompañar al Gobierno de la provincia de Misiones y a Appsa en sus objetivos de desarrollo de los puertos, como infraestructura al servicio del desarrollo económico y social del territorio”.
Luego de una reunión en la residencia oficial del gobernador Passalacqua, la comitiva se dirigió a Nemesio Parma, lugar donde se encuentra el nuevo puerto de Posadas y allí recorrieron las instalaciones. 

Logística y necesidad
Tanto desde el Gobierno de la Provincia como desde la empresa interesada, pusieron en relieve la importancia de la puesta en marcha de esta vía fluvial que va a abaratar costos y ayudará a que los misioneros tengan más producción y trabajo.
En ese sentido, Guzzini manifestó: “Nosotros conocemos estos dos importantes puertos y creemos que tienen mucha potencialidad, por eso agradecemos al Gobierno de la provincia, al ministro, de darnos la posibilidad de sentarnos a conversar sobre la probabilidad de ponernos a trabajar en estos puertos”.
“Nuestra empresa está especializada en logística de puertos y creemos que esta es una muy buena alternativa para trabajar y hacer posible que la producción pueda salir hacia el resto del país o del mundo, a través de una cadena logística donde se trabaje en conjunto con otras empresas y otros operadores, para lograr que esto esté en funcionamiento”, agregó.
La carta de intención señala, entre otras cosas,  que la empresa en cuatro meses deberá presentar a la Provincia un proyecto que podrá ser aprobado o no.
Y asimismo, en no más de seis meses, el puerto estaría funcionando, según avizoraron los empresarios. 

Crecen las expectativas por las gestiones en marcha

La localidad de Santa Ana aguarda con ansias el día en que pueda ver nuevamente en funcionamiento aquel puerto que una vez supo ser el motor de la región, hoy apenas visitado por algunas barcazas areneras.
Es que hace tiempo quedaron atrás los diez o quince barcos que por día atracaban en busca de pasajeros, yerba y demás productos regionales para atravesar el río Paraná y llegar hasta Buenos Aires.
Sin embargo, las gestiones para la recuperación de la vía fluvial abre las expectativas a la recuperación de todo aquel movimiento económico, que también era cultural.
El puerto de Santa Ana es uno de los más antiguos del río Paraná, fundado en el siglo XVII, dependiendo de Corrientes. Luego de la guerra con el Paraguay se potenció con la explotación primero de yerba mate y luego con caña de azúcar.
Como era la principal vía de comunicación con el mundo en ese momento, alrededor de 1935 comenzó a funcionar con mayor intensidad.
Una de las particularidades de este embarcadero es que a pocos metros de la costa el agua  es profunda, lo que no es común en el resto de los puertos de la tierra colorada.