“Parece que la justicia espera que maten a alguien para actuar en serio”

Bronca, impotencia, desconsuelo. Sentimientos que desbordan a la docente Adriana Back (36), propietaria de un Volkswagen Nivus que el pasado 27 de agosto fue impactado por un Volkswagen Vento que estaba al mando de una joven que conducía con 2,48 gramos de alcohol en sangre, es decir cinco veces superior al permitido.

Si bien no hubo que lamentar heridos, el coche de Back sufrió serios daños materiales que demandarán más de un millón de pesos en reparaciones. Asimismo, el seguro del Vento no opera porque la propietaria manejaba borracha.

En diálogo con El Territorio, la damnificada precisó que Gisela Viviana S. (25) -la dueña del Vento- se comprometió a pagarle dos cuotas de 750 mil pesos cada una, aunque hasta el momento no cumplió.

“Me arruinó el tren delante, el trasero, el eje, llantas, cubiertas, suspensión y rulemanes, entre otras cosas. Se requieren repuestos caros y, para colmo, algunos no se consiguen. Hasta ahora vamos rondando el millón de pesos y pusimos en venta la camioneta de mi marido para poder afrontar los gastos. Parece que la justicia espera que maten a alguien para actuar en serio”, opinó.

En tanto, mencionó que las partes plantearon firmar un acuerdo ante un escribano, aunque no se concretó y lo cierto es que “hasta ahora no tengo noticias de ella ni del abogado”, lamentó Back. 

Cuestionó que el Vento no haya quedado retenido ni la conductora detenida, lo que fue corroborado por este medio.

“No quedó detenida con 2,48 de alcoholemia. Sin embargo, yo estoy con asistencia psicológica por el estrés y los nervios de todo esto”, subrayó Back.

Repercusión

El siniestro vial se produjo el 27 de agosto, alrededor de las 21.30, en la intersección de avenida Libertad y calle Chubut, pleno centro de Oberá, ocasión en la cual el Vento quedó en posición invertida tras impactar contra el Nivus que se halla estacionado frente a la plazoleta Leoncito.

Posteriormente se viralizaron imágenes donde se observa a la propietaria del Vento muy alterada, insultando y evidentemente intoxicada, aunque resultó ilesa y caminaba por sus propios medios.

“Hacete rubio, negro de mierda”, le dijo a un transeúnte que le recriminó por su accionar.

En tanto, Back se mostró indignada porque “después esta chica se jactó y se burló por redes sociales. Publicó una foto de su auto y escribió ‘salí a dar una vueltita y di tres’. Pudo haber matado a alguien y todavía se ríe”.

En ese contexto, la damnificada radicó una denuncia penal contra la conductora del Vento.

Licencia retenida

Consultado al respecto, el juez de Faltas de Oberá, Francisco Sá, explicó hoy que aún aguarda el informe oficial del dosaje de sangre firmado por el bioquímico que actuó en el caso, tras lo cual decidirá la pena a la conductora del Vento.

Además, aclaró que la citada tiene retenida la licencia, por lo que no puede conducir.

Respecto a la multa, indicó que “dependiendo del dosaje se contemplan accesorias por el peligro generado, ya que el siniestro ocurrió en pleno centro y en una hora muy concurrida”.

También se refirió a los alcances de la Ley Nacional de Tránsito, que “en el artículo 72 habla de las medidas cautelares, entre ellas la demora del conductor por un máximo de 12 horas para evitar que mate a alguien o se mate a sí mismo. Transcurrido ese lapso recupera la libertad y, si no está en un estado aconsejable, va de acompañante, no de conductor. En el caso de esta mujer, que por las redes sociales todos vimos que estaba ebria, la tendrían que haber detenido”.