Violenta requisa en cárcel de Oberá dejó un saldo de tres heridos graves

sábado 29 de diciembre de 2018 | 6:00hs.
El procedimiento se concretó el jueves por la tarde y fue ejecutado por el personal del Giep.
El procedimiento se concretó el jueves por la tarde y fue ejecutado por el personal del Giep.
Daniel Villamea

Por Daniel Villamea Corresponsalía Oberá

Familiares de detenidos y personal que se desempeña en la Unidad Penal II de Oberá cuestionaron el accionar de efectivos del Servicio Penitenciario Provincial (SPP) que realizaron una violenta requisa que habría concluido por lo menos con tres heridos graves y otros tantos lesionados.
El procedimiento se concretó el jueves por la tarde y estuvo a cargo del alcaide mayor Marcelo Meza, jefe del Grupo de Intervenciones Especiales Penitenciarias (Giep), unidad proveniente de la ciudad de Posadas.
En diálogo con El Territorio, fuentes de la propia institución cuestionaron el accionar del Giep y reclamaron urgente atención médica para los reclusos malheridos, al tiempo que se contactaron vía telefónica con integrantes de la Comisión Provincial de Prevención Contra la Tortura (CPPT) para informar detalles del hecho.
Al respecto, se aguarda que en la jornada de hoy funcionarios de la CPPT lleven adelante una inspección de la cárcel de Oberá para corroborar in situ la situación denunciada en la víspera.
Hasta el momento, se sabe con certeza que la requisa se concretó en el módulo “A” para internos procesados y condenados. En tanto, por razones que deberán establecerse, los efectivos del Giep habrían hecho uso excesivo de la fuerza contra un grupo de reos.
Como consecuencia de la represión, tres sujetos padecieron lesiones graves y fueron derivados al sector “B”, donde permanecen aislados del resto de la población carcelaria.
Según averiguó este matutino, quienes padecieron el mayor maltrato fueron Germán Lencina Esquivel, paraguayo de 40 años, y otros dos internos de apellido Páez y Zaracho, de los cuales no trascendieron mayores datos.

Golpes y gritos
Si bien la requisa del jueves fue realizada por personal del Giep y bajo la supervisión del citado Meza, fuentes del propio SPP aclararon que la UP II sigue estando a cargo del alcaide inspector Walter Javier Flores, quien recién a partir del 5 de enero pasará a cumplir tareas administrativas en Posadas, según lo dispuesto por la Directora General del SPP, alcaide general Nilda Estela Correa.
Precisamente, en la edición del jueves este matutino publicó detalles del relevo de Flores, quien quedó en una posición muy complicada luego de una denuncia penal radicada por dos penitenciarias por el presunto cobro coimas para obtener visitas íntimas con privilegios en la cárcel de Oberá.
Por ello, a partir del 4 de enero el alcaide mayor Carlos Javier Insaurralde asumirá como nuevo director de la UP II, según establece la disposición 1411/18 del 20 de diciembre pasado.
En ese contexto, voces internas especularon con que la violencia desatada el jueves podría guardar relación con algún tipo de reprimenda por la denuncia del supuesto cobro de coimas.
“Formaron un círculo para golpear a los internos con piñas, patadas y cachiporras. Hay tres que están graves, muy golpeados y todavía no recibieron atención adecuada. Los gritos se escuchaban afuera del penal y a los tres los sacaron a la rastra, todos ensangrentados. Además, hay otros con lesiones leves que siguen con la población del sector A”, precisó un oficial.
En tanto, mencionó que el procedimiento permitió el secuestro de siete celulares y dos chuzas o facas tumberas.
Ayer fue el turno de la requisa del sector “B” o fase de confianza, procedimiento que estuvo a cargo de los jefes de régimen de la UP II y concluyó sin lesionados.


Protocolo y excesos

La violenta requisa del jueves culminó a las 21 y horas más tarde comenzaron a circular trascendidos, lo que inquietó a varios familiares de internos alojados en la cárcel de Oberá.
Para colmo, según comentó la concubina de un preso, desde la dirección no brindaron información alguna y todos deberán esperar hasta mañana para poder visitar a sus familiares y constatar su estado de salud, con la angustia que ello implica.
Por otra parte, fuentes internas confirmaron que el paraguayo Lencina Esquivel sería uno de los más heridos y permanece aislado en una celda del sector “B”.
“A esta altura del año la población está un poco exaltada por la fecha y suele haber incidentes, por eso se extreman los controles, pero siempre se debe seguir el protocolo y en este caso claramente se excedieron”, lamentaron.
Respecto al paraguayo, agregaron que “lo golpearon mucho, pero es un preso curtido y cuando lo sacaban gritó “los voy a denunciar”. Está preso desde hace muchos años en Oberá y conoce sus derechos”.
En un juicio abreviado en 2010, Lencina Esquivel fue sentenciado a 15 años de prisión tras aceptar su culpabilidad en un hecho de robo y abuso sexual en perjuicio de una mujer.