“Tuvimos que ir a fiscalía para que nos hagan caso”

Enorme conmoción generó la denuncia por abuso sexual contra un cabo de la Policía de Misiones, acusado de violar a una cuñada menor de edad con la que convivía junto a su familia.
En su edición de la víspera, El Territorio publicó detalles del caso que se mantiene bajo estricta reserva para preservar la integridad de la presunta víctima que tiene 12 años, aunque los abusos habrían comenzado cuando tenía 8 o 9, según la denuncia.
En tanto, ante la consulta de este medio, un familiar de la niña mencionó que no habría sido la primera vez que denunciaron al sujeto por abuso sexual, aunque la misma no habría prosperado.
“Tuvimos que denunciar en fiscalía para que por fin nos hagan caso. No sé si lo protegían por ser policía o qué, pero la primera vez denunciamos en comisaría no pasó nada. Pero gracias a Dios, ahora la justicia tomó las medidas necesarias”, indicó.
Además, aclaró que el cabo fue detenido el lunes a la noche, alrededor de las 21, en su lugar de trabajo. El sospechoso se desempeñaba en la División Bomberos de las Unidad Regional II y minutos antes fue convocado por el jefe de la dependencia, comisario mayor Omar González, para que se presente de inmediato en la base por razones de servicio.
Al menos ese fue el argumento, aunque al llegar a la dependencia de avenida José Ingenieros y avenida Sarmiento, el propio González fue el encargado de notificarle sobre la orden de detención suscripta por el juez de Instrucción Dos, Horacio Alarcón.
Tras la revisación médica de rigor y para preservar su integridad física, el cabo quedó alojado en una dependencia local separado de la población común.

Crudo relato
Fuentes del caso mencionaron que la presunta víctima es cuñada del policía y los abusos habrían comenzado cuando tenía entre 8 y 9 años. El sujeto habría aprovechado la confianza de la pequeña para someterla sexualmente en al menos dos ocasiones en las que se quedó solo con ella.
Al respecto, tras solicitar la reserva de su identidad, el familiar que charló con este medio mencionó que durante años el acusado mantuvo bajo amenazas a su entorno, lo que ahora deberá ser corroborado por la Justicia.
Asimismo, se sospecha que los abusos se prolongaron durante tres o cuatro años, lo que marca la gravedad del caso y las consecuencias físicas y psíquicas para la criatura.
Precisamente, un familiar cercano habría notado ciertos indicios en la conducta de la criatura y comenzó a indagar al respecto, lo que derivó en el crudo relato de las circunstancias que padecía desde hace varios años.
En las próximas horas el policía sería citado a indagatoria, mientras se aguarda que la niña declare en Cámara Gesell.
En este caso se puso en funcionamiento el nuevo protocolo de actuación pericial-forense en los delitos contra la integridad sexual, vigente desde el 1 de diciembre en la segunda circunscripción judicial.
“El abordaje es pericial, rápido y está a cargo de un equipo judicial, tras lo cual se deriva al sistema de salud para el abordaje asistencial”, explicaron.  
Se trata de un equipo multidisciplinario coordinado por un ginecólogo en turno, un bioquímico judicial, psicólogos o psiquiatras, según las características del caso en particular.