Resultado mata fútbol

Guaraní ganó y punto. Le faltó fútbol, no tuvo variantes, pero la capacidad de Chipi Vera fue la clave. El delantero anotó el primer gol de la victoria y fue partícipe del segundo. Fue 2-0 para la Franja, que lidera la zona 7 de la región Litoral Norte y quedó a un paso de la clasificación a la segunda fase del torneo Regional.

El que empezó con todo fue el visitante. Los del Alto Paraná avisaron tres veces, pero la mala puntería no les permitió abrir el marcador. Contestó la Franja con una buena combinación entre Enzo Bruno y Guido Barreyro, esa dupla que tiene que aceitarse, aunque el dueño de casa estuvo impreciso en esos primeros instantes y muy desorientado.

Cuando Nievas Escobar se juntó con Brian López y Bruno se vio lo mejor de Guaraní, pero esos chispazos de fútbol fueron esporádicos y por eso muchas veces fueron Cabrera y Millán los que salieron desde el fondo a los pelotazos.

Nacional no pudo mantener esa presión alta de los primeros minutos, entonces cambió el método. Apostó a aprovechar los errores de una defensa que estaba incómoda. Poco a poco los visitantes empezaron a retroceder metros. Un poco porque la Franja se hizo dueño de la pelota y otro poco porque los del Alto Paraná empezaron a sentir el desgaste de los primeros minutos.

El nerviosismo de Guaraní se notó en las imprecisiones de Comes y Dujaut, en las entradas fuertes de Nievas Escobar y en los pelotazos sin sentido que salieron de la defensa. Esos nervios pasaron de adentro hacia afuera. De los jugadores al DT y a los hinchas. Esa incapacidad de manejar la pelota con tranquilidad dejó a Bruno y a Barreyro aislados.

Ese escenario le sentó muy bien a Nacional. Los del Alto Paraná esperaron pacientes a que la pelota le llegara a Sosa y a Acosta, los dos más movedizos del ataque de los de Puerto Piray, que al igual que en el primer partido desaprovecharon muchas oportunidades y perdonaron demasiado a la Franja.

Cuando los planes no salen hay que buscar alternativas. Nacional ejecutó su idea a la perfección y Guaraní careció de ideas. Por eso los del Alto Paraná se fueron al descanso tranquilos, imagen totalmente diferente para la Franja.

Con experiencia

Guaraní cambió la cara en el complemento. Fue con más ganas y pisó varias veces el área de Mendoza, pero más por ganas que por juego, más por ímpetu que por la paciencia. De todas maneras, la Franja hizo lo que el momento pedía: arrinconar a su rival. Nacional utilizó todos los recursos para ganar tiempo.

Labaroni mandó a la cancha a Chipi Vera y Ulises Silveira, dos que en la semana trabajaron diferenciado y eso se notó. La Franja eligió atacar por afuera y ninguno pudo entrar en ritmo. Si la idea era rodear a Bruno con más opciones, no surtió efecto. Nada iba a romper el cero, salvo un arranque individual o una jugada en equipo.

En la primera que Guaraní metió más de cinco toques seguidos se abrió el arco. Poclaba para Bruno, Bruno lo vio solo al Chipi Vera y el ex Platense usó toda su experiencia para ponerla contra un palo a contrapierna de Mendoza y desahogar a Villa Sarita.

Lejos del fútbol que desea el DT, la Franja apeló a la actitud. Entró en el juego de Nacional, metió, raspó y buscó empujar con más ganas que con juego. Otra vez Chipi Vera fue clave. El delantero definió cruzado, Mendoza alcanzó a tocarla y apareció Ulises Silveira para decretar el 2-0 definitivo.

Seguramente se presentarán más partidos como el de ayer, pero ahí estará o no la capacidad de Guaraní de sacarlos adelante con la pelota contra el piso y variantes o con pelotazos y apelando a la experiencia de algunos de los de mejor pie.

La fecha libre vendrá bien para acomodar la cabeza y encarar el último partido, quizás, con la clasificación en el bolsillo.

Hubo homenaje

Humberto ‘Tono’ Pérez recibió ayer un emotivo homenaje en el Clemente Argentino Fernández de Oliveira. 

La tribuna frente a la techada pasó a llamarse como el ex presidente franjeado, quien se fundió en un abrazo con César Decamilli en la platea tras el reconocimiento.