Preocupa que la Isla Apipé sufra desabastecimiento por la bajante

Si bien por el momento la provisión de alimentos está garantizada, la bajante extraordinaria del rio Paraná termina afectando a los isleños. Por ejemplo, el Banco Móvil no pudo llegar hasta San Antonio, por la crítica situación.

En contacto con El Territorio, el vice intendente de San Antonio Juan Dacunda, expresó que la semana pasada no podía trasladarse la balsa, y generaba cierto desconcierto para el traslado de mercaderías de primera necesidad hacia territorio insular.

Dacunda expresó que “el rio sube y baja, en el promedio estipulado por los organismos competentes, por suerte ahora contamos con la balsa, que se traslada con menos carga de lo habitual y utilizando otros tiempos, es decir es mucho más lento e inclusive se cambió el trazado” y agregó que también “ya recibimos la ayuda de  la Entidad Binacional Yacyretá que nos envió bolsones de mercadería para los más humildes, y vamos a esperar la semana que viene, el gobernador también se comprometió a enviarnos alimentos, por eso hoy podemos decir no que estamos bien, pero con posibilidades de seguir aguantando con la expectativa de que esto   mejore” explicó.

 

El gobernador correntino Gustavo Valdés garantizó para la isla la provisión de alimentos, medicamentos e insumos básicos, hasta que se normalice el caudal del afluente y finalice el aislamiento social, preventivo y obligatorio que rige en todo el país. La ayuda de primera necesidad llegaría por vía aérea.

Al afectarse la navegación de las embarcaciones que comunican al Municipio de San Antonio de Apipé Grande con Ituzaingó, se vio perjudicado también el operativo del Banco Móvil, que estaba previsto para el pasado viernes. En éste sentido, Dacunda indicó que “ya que vino la balsa nos comunicamos para que pueda venir el Banco móvil, que se podría dar la semana queviene”, y agregó “ojalá se pueda dar una solución a la gente que no puede ir hasta Ituzaingó para cobrar o realizar algún tipo de trámite en el Banco”.

El vice intendente de San Antonio isla Apipe Grande Juan Dacunda, también expresó que si bien las restricciones por la pandemia hicieron que haya un movimiento de peces más pronunciado, “la pesca ilegal no se corta lamentablemente, si se nota una disminución de pescadores, por ende el pez se puede mover más libremente y  se deja ver” a lo que agregó “hemos visto surubí, pacú, y hasta dorados de un tamaño considerable, que andan buscando su presa por la costa, y que brindan un pasaje maravilloso” contó.