Posadas: Aida lucha entre las ganas de salir adelante y la discriminación

miércoles 13 de febrero de 2019 | 14:20hs.
Posadas: Aida lucha entre las ganas de salir adelante y la discriminación
Posadas: Aida lucha entre las ganas de salir adelante y la discriminación
Aida Vaztique es paraguaya y actualmente se desempeña como taxista en la ciudad de Posadas para brindar otro sustento a su hogar que está compuesto por su marido y sus cuatro hijos varones de 9, 6, 5 y dos años. Además comenzará el tercer año de la carrera de Abogacía y trata de salir adelante junto a su familia aunque eso se vio obstaculizado tras ser punto de burlas entre sus colegas que también prestan el servicio en la capital provincial. 

“Fui rechazada en muchas paradas, ahora no tengo una fija pero cuando hay algún lugar me meto, no me adueño de ellas porque son libres y todos tenemos el mismo derecho de parar en la que uno prefiera. A veces ocurre que los muchachos, no todos, se adueñan de la parada y tienen clientes específicos que creen que uno les va a sacar. Cuando comenzó todas estas clases de burlas yo me callaba o me iba, después me decían otros compañeros que no tendría que hacerlo, entonces me comencé a resistir un poco más”, dijo en diálogo con Acá te lo Contamos por Radioactiva.

Sobre la gota que rebalsó el vaso puntualizó que fue cuando la ignoraban en cuanto a los pedidos que ella hacía para que corran los automóviles de distintos lugares en el microcentro, “ahí fue cuando dije que esta situación en algún momento tenía que terminar, nadie es dueño de las paradas. Este trabajo lo comencé hace cuatro meses y tengo otras compañeras que también paraban conmigo pero no las veo mucho porque están más por radio que tienen otros lugares pero si las veo yo paro donde están ellas”.

“Los otros conductores de taxis o remises siempre me decían que no era un trabajo para una mujer pero yo les decía que tenía el mismo derecho y además me decían otras cosas que fueron llevando a que me cansara la situación. Después me aconsejaron que ponga un chofer para mi auto porque iba a sufrir mucho maltrato porque muchos son como patoteros pero seguí trabajando por ahí cambiando de zona y me aboqué más en el centro”, aclaró.

Por otra parte sostuvo que una de las razones por las que continúa con su trabajo es que, a parte de gustarle, sirve para pagar cuentas que tiene que saldar, “este auto lo saqué con un plan y cuando decidí retirar el automóvil lo hice con un préstamo y tengo esa cuenta más la cuota del auto y yo con un chofer no cubro el gasto".

Aida es peluquera y a parte de ser mamá continúa la carrera de abogacía pese a los contratiempos, “es difícil ser mamá y estudiante pero hay que intentar. Siempre me gustó esa carrera, de chica decía que iba a ser presidente de mi país y después el amor me trajo para estos lados y cambié mi lugar, estoy casada con un argentino desde el 2004 porque el corazón manda más, soy naturalizada argentina”.

“Mi marido es el que más me apoya porque me dice que si yo quiero él me acompaña en todo , gracias a Dios, o sino me costaría un montón porque uno tiene que acomodarse con la facultad y la escuela de los chicos que afortunadamente son muy buenos alumnos. Las horas de trabajo dependen siempre del movimiento, empiezo a la mañana, corto a la tarde y a la nochecita hago un poco más pero cuando comiencen las clases va a ser distinto y voy a trabajar un poco menos”, remarcó.

Finalmente agregó que busca seguir adelante porque , “no hay que conformarse con lo básico, con casi nada, yo creo que no está bien. Las cosas que hago me gustan, me divierten, disfruto, aprendo mucho y la idea es dar un servicio eficiente como debe ser”.