Picada en la Uruguay, el día después: entre pericias y nuevos testimonios

miércoles 31 de julio de 2019 | 6:30hs.
Picada en la Uruguay, el día después: entre pericias y nuevos testimonios
Picada en la Uruguay, el día después: entre pericias y nuevos testimonios
Jorge Posdeley

Por Jorge Posdeley fojacero@elterritorio.com.ar

El día después a la presunta picada registrada sobre la avenida Uruguay de Posadas continuó dando que hablar. Es que mientras los dos jóvenes implicados continúan detenidos y hoy podrían ser llevados a declarar, en la víspera sus automóviles fueron sometidos a pericias que serían clave para la continuidad de la causa y desde el entorno de la mujer colisionada en medio de la prueba velocidad adelantaron que se constituirán como querellantes particulares. 
Tal como publicó El Territorio, el hecho que dio origen a toda la investigación se registró el lunes, cerca de las 2 de la madrugada, sobre la avenida Uruguay, a pocos metros de su intersección con la calle Florencio Sánchez. 
Por esa arteria circulaban a gran velocidad un Renault Clio (dominio NVC-918) y un Volkswagen Gol (SRA-193) hasta que este último terminó embistiendo de atrás a un Hyundai Coupé Génesis cuya conductora, María Soledad Adorno (38), resultó con diversas heridas y fracturas que le demandarán intervenciones quirújicas y varias semanas de recuperación. 
La secuencia casi mortal incluso quedó registrada en imágenes mediante varias cámaras de seguridad, a tal punto que una de ellas, ubicada en la intersección de las avenidas Uruguay y Trincheras de San José, reflejan que ambos rodados utilizaron el sémaforo como señal de largada. 
Según lo que se pudo reconstruir, el Clio era conducido por joven identificado como Franco Javier M. (21), en tanto que al mando del Gol iba Alejandro Gabriel R. (18), quienes permanecen alojados en distintas comisarías posadeñas y en la jornada de hoy podrían ser trasladados al Juzgado de Instrucción Uno para prestar declaración indagatoria. 

Suspensiones bajas
Previo a ello, en la víspera se dispuso que ambos vehículos sean sometido a pericias efectuadas por parte del personal de la Dirección de Verificación Automotor de la Policía de Misiones. 
Los procedimientos fueron realizados en la Comisaría Tercera, donde ambos vehículos quedaron luego de ser incautados. 
En este contexto, según señalaron las fuentes consultadas, preliminarmente se pudo constatar que los dos vehículos presentan las suspensiones modificadas, más aún el Clio, el cual tiene suspensión regulable y escapes libres, en otros elementos que dan a inferir una preparación especial para desarrollar mayor velocidad. 
Por el momento, ambos jóvenes están acusados por una infracción al artículo 193 bis del Código Penal de la Nación Argentina, el cual esteblece que “será reprimido con prisión de seis (6) meses a tres (3) años e inhabilitación especial para conducir por el doble del tiempo de la condena, el conductor que creare una situación de peligro para la vida o la integridad física de las personas, mediante la participación en una prueba de velocidad o de destreza con un vehículo con motor, realizada sin la debida autorización de la autoridad competente”. 
Sobre este punto, las fuentes explicaron que la situación de los jóvenes es complicada, dado que la figura ya penaliza el mero hecho de participar de una picada, independientemente de qué otro hecho puedan provocar en medio de esa acción. “La ley marca que el sólo hecho de correr una picada ya representa un riesgo y por ello ya está penalizado”, indicaron. 
Ahora, resta aguardar cómo evoluciona médicamente la mujer damnificada y a partir de ahí se podría configurar otro tipo de delito. 

“Corrían picadas conscientes”
Justamente, quien abordó esta cuestión en la víspera fue el letrado Luis Antonio Duarte, quien en diálogo con Radioactiva adelantó que se constituirá como querellante particular en la causa en representación de Adorno, quien salió de terapia intensiva pero aguarda ser operada. 
“Al no estar Soledad en su momento en condiciones de firmar nada no habíamos podido hacerlo, recién lo estamos por hacer ahora como querellantes particulares dentro de la causa penal que se está llevando adelante y vamos a poder tener un control de todo lo que se viene realizando. Obviamente, después también vendrá la parte del reclamo a la compañía de seguros y a los causantes del hecho por la cuestión civil por daños y perjuicios que realmente ocurrió. Todo queda sujeto a un parte médico más avanzado y definitivo sobre Soledad”, expresó Duarte. 
Y añadió: “La investigación penal seguramente se va a centrar en una cuestión de lesiones, pero sucede que con lo que diga el parte médico vamos a ver si estamos ante lesiones graves o gravísimas porque todavía no lo sabemos. Los familiares tienen la esperanza de que todo va a salir bien, pero como todavía hay que hacer intervenciones quirújicas no sabemos qué puede pasar a futuro con su salud”. 
Duarte luego señaló que “la pena más grave que podríamos hablar ahora es de 3 a 10 años de prisión, sin perjuicio claro está de que se los va a inhabilitar de manejar por el período de tiempo que el juez considere prudente. Yo creo que acá tiene que ser muchos años”. 
Por último, el letrado además reflexionó sobre una arista que considera importante en este caso y es que ambos implicados habrían dado negativo en los exámenes de alcoholemia pero para Duarte esto a su vez implica que los jóvenes estaban plenamente conscientes de lo que hacían. 
“El alcoholemia habría dado negativo, con lo cual uno dice si es bueno o malo, pero en un hecho como este hasta inclusive agrava la situación de ambos porque quiere decir que estos chicos corrían picadas conscientes de lo que estaban haciendo y, sin lugar a dudas, una persona que corre picadas en una arteria como la avenida Uruguay sabe que podía haber causado una muerte. Además de eso, lo hacen con tantan impunidad que el hecho ocurre a metros de la Comisaría Tercera y del Comando Radioeléctrico. Hubiera sido igual de grave si ocurre en un descampado, obvio, pero esto demuestra la intencionalidad y la impunidad total con la que se movían estos chicos que hicieron esto con total falta de respeto inclusive para las autoridades policiales”, cerró Duarte.

“El domingo a la tarde el Clio ya estaba andando a alta velocidad”

El caso, ocurrido apenas una semana después de otro hecho similar registrado en Puerto Iguazú, volvió a poner el tema en debate social y en la víspera Radioactiva también puso al aire el testimonio de un testigo que consideró oportuno intervenir en la situación y su relato a la larga podría ser importante. 
Fue un muchacho identificado como Cristian Gómez quien ayer habló con el programa Acá te lo Contamos y allí expuso que la noche previa al hecho en cuestión ya había visto al Renault Clio circulando a gran velocidad por la ciudad.
“El día domingo, a eso de las 7.30 de la tarde yo me estaba yendo a Villa Cabello por López y Planes y este a auto, el Clio que tiene una trompa roja que lo hace distinto, ya estaba andando a alta velocidad. Me lo crucé de frente y me llamó la atención la velocidad. Él venía hacia el centro”. 
Y lo descrito por el testigo coincide con el Clio incautado, el cual efectivamente presenta un ploteado de color rojo que cubre la totalidad de la trompa, además de varios vinilos más en otras partes, lo cual lo transforma en un rodado singular. 
Y Gómez continuó: “Más tarde me comentan que ese mismo auto tuvo un accidente entonces lo puse en Facebook. No quiero que esto le pase a un familiar, un vecino o a cualquiera que esté caminando o yendo a trabajar y que venga una persona que tenga poco en la cabeza y haga estas cosas”. 
“Esta persona casi mata a esa chica. Yo me solidarizo con esta familia y con esa chica que hoy está pagando con politraumatismos y fracturas. Esta persona -por el conductor del Clío- no puede estar libre de un día para el otro y el fin de semana que viene estar nuevo en la calle”, expresó luego.  
Por último, el muchacho señaló que “me comuniqué con la familia de la chica porque tenemos que ser responsables entre todos para que no pasen más estas cosas con gente inocente. Esto no fue un accidente, esto fue a salir a correr en la calle pensando que están en el autódromo. Son jóvenes imprudentes, tienen un arma en la mano, que es el auto. El semáforo ese día lo usaron de señal de largada. Es indignante”.