Otra campaña de la hipocresía

domingo 13 de enero de 2019 | 6:00hs.
Guillermo Laborda

Por Guillermo Laborda La Política Online

Buen comienzo del año en lo financiero con riesgo país y dólar a la baja, acciones en alza y las tasas en pesos bajan aunque en dosis milimétricas. Las bandas de intervención del dólar fijadas por el BCRA perdieron el invicto y pueden gatillar este mes el esperado descenso pronunciado de la tasa de las Leliq, las Letras de Liquidez del BCRA. El éxito del plan económico y, por ende, de la suerte electoral de Cambiemos será en función de la velocidad en el descenso de las tasas de interés. Para fin de marzo, en el gobierno estiman que llegará al 40% desde el 59% actual. ¿Alcanzará para empujar a la economía rumbo a las Paso del 11 de agosto? Muy poco, por cierto. Más servirá en ese sentido para el gobierno la reapertura de las paritarias 2019 con salarios que le pueden llegar a ganar en unos puntos a la inflación.
Los optimistas del mercado son minoría, pero van en ascenso. Su teoría es la siguiente: en caso de ganar Mauricio Macri las elecciones presidenciales, y en tanto y en cuanto el contexto internacional no brinde sorpresas negativas, las acciones argentinas deberían subir 35-40% en dólares. En parte es lo que está sucediendo con los papeles del Banco Galicia, que treparon 25% en dos semanas. Ahora bien, para ganar ese 40% en dólares en teoría debe verificarse el triunfo del gobierno en los comicios. Lo que está claro es que será otra campaña electoral plagada de hipocresías por parte de los candidatos. Gane quien gane, deberá realizar otro fuerte ajuste de las cuentas públicas apenas asuma, el 10 de diciembre próximo.
Mauricio Macri eventualmente habrá aprendido de no haberlo hecho hace cuatro años, pero, claro, no podrá decir nada de la herencia recibida en esta ocasión. Si triunfara alguien de la oposición, el dilema pasará por la reestructuración de la deuda o ese ajuste de las cuentas públicas. Hasta una medida ya se puede imaginar, de nuevo, gane quien gane: en una reforma previsional el cambio en la indexación para los 3,5 millones de personas que fueron jubilados por Cristina Kirchner sin haber efectuado aportes. También un incremento en la edad jubilatoria. Y cambios en el sistema de pensiones. Luego viene el enésimo intento de una reforma laboral e impositiva. Bolsonaro puede ser una luz que allane el camino en ese sentido.
Son semanas en las que el flujo de información se traslada a Punta del Este. El jueves pasado, Advise, uno de los asesores financieros líderes en la región, agasajó en La Huella a sus clientes y amistades en una noche en la que no faltaron exquisitos platos acompañados de la música que hizo bailar a propios y extraños, de la mano de su CEO Miguel Sulichin, experimentado banquero privado del cono sur, movilizó al público más exclusivo de Argentina, Paraguay, Uruguay y Brasil. La impresión entre inversores experimentados es que enero presenta una vez más renovadas apuestas a activos de riesgo como los países emergentes. Como en el casino, se escuchó el “hagan juego, señores”. Y las apuestas se están haciendo, llegando hasta al peor alumno de la región, la Argentina. La decisión de la Corte norteamericana sobre el caso YPF y el fondo Burford otorga más tiempo al gobierno en un juicio que le puede constar al Tesoro cerca de 3.000 millones de dólares. Una tarea a futuro: dado que Burford es una sociedad cotizante en el exterior, pueden verse, en sus estados contables, los accionistas e “inversores” en el juicio contra Argentina por la expropiación de YPF. Y allí cerca del 40 por ciento del total del reclamo estaría huérfano, aunque no habría que tener demasiada imaginación para descubrir los accionistas finales.
Aún con el clima positivo en mercados, no hay buen humor entre agentes de Bolsa. Es que la CNV está sobrecargando de regulaciones a los operadores, lo que derivará seguramente en un cierre de oficinas. La reglamentación del impuesto a la renta financiera gatilló otra andanada de regulaciones y deberes de información que agotó a agentes.

El año de las Leliq
El primer informe del Oso del año vino con advertencias respecto al mercado financiero. Este ejecutivo de banca privada que se escuda detrás de ese seudónimo otorga su visión sobre cuanto está sucediendo en Estados Unidos, Venezuela, Brasil y lógicamente la Argentina. A continuación, los puntos principales de su tradicional mail semanal a clientes:
1) Hace un año los mercados globales estaban en piloto automático con crecimiento crucero y con la volatilidad muy baja y exceso de optimismo con la mayoría de los analistas, pronosticando una suba del 20% en el S&P (y luego fue el peor año desde el 2008); empezamos el 2019 con una desaceleración sincronizada con alta volatilidad y mucho pesimismo pero el S&P se ha recuperado un 8,6% desde sus mínimos el 26 de diciembre.
2)Es increíble cómo los mercados se enceguecen y así como a fines del 2015/6 con envión que duró hasta enero del 2018 Mauricio Macri y el mejor equipo de los últimos 50 años provocaron una suba increíble en los activos financieros y propiedades, ahora estamos viendo la remake en Brasil; seguramente seguirá por los primeros 100 días y después veremos qué tanto de lo que anuncia y prometen se concreta; la gran diferencia es que la renta fija con riesgo soberano brasileño no tiene mucho para comprimir, aunque hay bonos corporativos que sí y por el lado de las acciones, a pesar de lo que ya han subido, tranquilamente podemos ver a una PBR en 20 dólares nuevamente, es decir un 30 a 40% arriba si sigue este carnaval carioca.
3) En diciembre no hubo emisiones de bonos de alto rendimiento (high yield) por primera vez en diez años y las nuevas emisiones tuvieron una caída del 42% con respecto al 2017; en un escenario de suba de tasas veremos qué nos depara el 2019.
4) Bristol Myers ofreció U$S 74 mil millones para comprar a Celgene, pero, a juzgar por el precio al que está cotizando, esta última deberá mejorar la oferta para poder cerrar la compra.
5) En Venezuela, la Asamblea Nacional no reconoce Maduro al igual que unos cuantos países más con Estados Unidos a la cabeza mientras que del otro lado los tenemos a Rusia, China y Turquía; un escenario de reestructuración todavía se ve lejano y el PDVSA 26 ya tiene el equivalente de 20 puntos en intereses no pagados (PDI) y cotiza a 15,50.
6) En Argentina hemos tenido una caída importante de riesgo país y un rally espectacular en acciones con un tipo de cambio planchadito y una tasa de interés que sigue por las nubes evitando todo tipo de recuperación en la actividad de la economía real. ¿Por qué no bajan un poco la tasa y dejan apreciar el tipo de cambio? Disfruten de este rally para aquellos que tuvieron lo necesario para comprar, pero a estar atentos porque de fondo todo sigue igual; hace un año fueron las Lebac, este año serán las Leliq. No aprendemos más.