En Oberá aumentan los casos febriles pero hay poca internación

Hasta ayer el hospital Samic de Oberá tenía tres pacientes internados con dengue, pero afuera el panorama es alarmante. Los casos febriles (sospechosos) por la enfermedad crecen con ritmo sostenido desde hace varias semanas y obligan a multiplicar las acciones en prácticamente todos los barrios. Equipos integrados por promotores de salud y operarios municipales avanzan casa por casa en busca de personas con síntomas compatibles, haciendo fumigaciones (focalizadas y a nivel espacial con camionetas), y entregando información a los vecinos sobre la importancia del cuidado de los espacios y la eliminación de reservorios, clave para bajar los niveles de proliferación del mosquito Aedes aegypti.

 “Se está trabajando fuertemente en los municipios en los que hay muchos casos febriles y Oberá en este momento es uno de ellos con un crecimiento sostenido desde hace varias semanas”, alertó el ministro de Salud, Héctor González, analizando que “debemos continuar trabajando de manera coordinada, es decir, con la parte sanitaria saliendo a buscar pacientes febriles, generando conciencia en los vecinos y a su vez, el municipio, atacando al vector a través de la fumigación y la limpieza de patios”.

 “La sociedad debe entender que la limpieza de su casa, de los terrenos, es determinante”, dijo el funcionario y reveló que “de cada diez pacientes con dengue, en los domicilios de dos se detectaron criaderos de mosquitos”. En línea con eso González ponderó el cuidado personal y puso en relieve que en los hospitales “vamos teniendo personas cada vez más susceptibles a la enfermedad y son los cuadros que pueden complicarse”.

 “La fumigación es una herramienta más, después las responsabilidades de cada ciudadano en su casa, en su patio o en su terreno, es determinante”, insistió González, y advirtió que el aumento de casos podría continuar “hasta mediados de marzo”. El director de Servicios Públicos y Ambiente de Oberá, Herbert Castellanos, detalló sobre los operativos que “en la medida que se van notificando al municipio los casos febriles, tanto desde salud pública como de la parte privada, vamos registrando en un plano de la ciudad y de acuerdo a la cantidad de casos se opta por el tratamiento focal y el tratamiento espacial donde hay muchos afectados”.

 
“Desde el 18 de diciembre del año pasado, cuando se detectó el primer sospechoso, fuimos incluyendo a los barrios en la medida que se fueron notificando casos”, apuntó Castellanos y valoró el trabajo coordinado con Salud Pública. “Hemos intervenido en todos los barrios de la ciudad utilizando las estrategias sugeridas según la cantidad de casos”, añadió.