Crimen de Maxi Olivera: Su hermano contó que el agresor llegó, disparó y salió corriendo

En vez de ser un día de celebración, de unión entre los más cercanos para festejar un año más de vida de un ser querido, por estas horas el dolor invade los corazones de todos aquellos que conocían a Maximiliano Olivera, un joven eldoradense que hoy cumpliría 25 años y que el último domingo fue asesinado de un certero disparo en el pecho mientras compartía una juntada con amigos, a un costado de una cancha de fútbol de su barrio.

Mientras los investigadores buscan reconstruir la secuencia mortal y determinar la responsabilidad que tuvo en el grave suceso un adolescente de 17 años conocido con el apodo de Junior y que está apuntado como autor del disparo, la familia Olivera esperaba poder recibir lo antes posible el cuerpo de su ser querido para darle el último adiós luego de una sentida ceremonia velatorio. Y es que la realización de la autopsia se concretó en la Morgue Judicial de Posadas y su posterior traslado a la Capital del Trabajo demoró un poco más de lo previsto.

Según pudo reconstruir este matutino, Maximiliano tenía seis hermanos y era el segundo mayor de edad. Si bien no tenía trabajo estable era muy trabajador y se ganaba la vida haciendo distintas changas. Cuando la situación lo requería salía a cortar pasto y se ofrecía a cortar el cabello a los vecinos para juntar unos manguitos más para sus gastos y los de su familia. Los más cercanos lo describieron como un joven muy guapo y todo el barrio le tenía mucho cariño por ser siempre atento y solidario con quien lo necesitaba.

Uno de los que puede dar fe de esto último es Carlos Olivera (23), uno de hermanos de Maxi y que ayer seguía sin encontrar explicaciones a lo ocurrido. En una entrevista que mantuvo con este matutino, el joven confesó que jamás pensó que el adolescente detenido podría hacerle algo a Maxi. Su familia conocía al principal sospechoso desde muy pequeño ya que hasta hace pocos días compartían momentos juntos y ambas familias siempre tuvieron una buena relación por vivir muy cerquita una de la otra.

"Este chico se crio con nosotros, era casi como de la familia. Desde chiquititos que lo conocíamos. Incluso hace tres días habia estado en la pileta de mi casa. Por eso no entendemos qué hizo", recordó Carlos sobre el perfil del detenido, quien gran parte de su vida vivió en Buenos Aires y que en la actualidad estaba viviendo al igual que los Olivera en el barrio Santa Rosa de Lima.

Los hermanos Olivera junto a su mamá. / Foto: Gentileza

Ataque en la cancha

Sobre los posibles motivos que pudieron haber llevado al adolescente a atacar a Maxi, el entrevistado comentó que desde hacía un tiempo que Junior buscaba comprarle una motocicleta a su hermano. Pero que luego de no llegar a un acuerdo su familiar decidió dejar cancelar el negocio, para luego dejar de responder los mensajes al adolescente.

"Despúes del mensaje, mi hermano no le escribió más, pero él (Junior) le seguía molestando. Y ahi pasó eso. Mi hermano estaba tomando en la cancha, con los compañeros. Entonces agarra, llega al lugar, le dispara y sale corriendo. Después agarra le manda después de dispararle un audio a mi hermano que decía que le cagó la vida y esas cosas. Nadie iba a pensar que pasaría esto porque el chico se crio con nosotros", describió el familiar.

En el citado audio, al que este medio tuvo acceso, el ahora detenido decía: "Te dije que te ibas a regalar pedazo de gato, te arruiné la carrera pedazo de gil, eso es para que te acuerdes de mí pedazo de gato".
Por otro lado, el entrevistado recordó: "Mi hermano estaba al lado de la cancha, junto a unos amigos, porque cada domingo salen de jugar al futbol y toman algo. Ahí fue el impacto y fue la novia que estuvo con él hasta lo último y que vivió los momentos más fuertes con él".

A su vez, describió que el impacto que recibió Maxi perforó su pulmón y una vena principal. Y que además tuvo dos infartos previo a su deceso en el hospital Samic de Eldorado. "Según lo que me comentaron, (Junior) llegó y empezó a apuntarle uno a uno a los que estaban con mi hermano, después se alejó un poquito y cuando mi hermano se paró ahí le da el tiro que impactó al lado del corazón. Un compañero le corrió para agarrarle y él (Junior) le apuntaba con el arma y por eso no podían acercarse mucho porque por ahí les disparaba", precisó.

Además, otro detalle que contó el entrevistado reconoció que lo tiene muy apenado es que ese domingo no pudo hablar con su hermano. Comentó que Maxi se fue temprano a la cancha y que ni siquiera su mamá lo vio. También narró que recibió el mensaje de lo ocurrido cuando se disponía a ir al hospital a cuidar a su abuelo que está internado. "Fue algo mucho más doloroso porque no fue ni un chau, ni un nos vemos, ninguna despedida".

"El era muy querido en el barrio, todos le tenían mucho aprecio. El barrio quedó paralizado y toda la gente no puede entender porque era un chico muy bueno, que no molestaba a nadie", contó Carlos, quien además señaló que durante toda la jornada de ayer recibió en su casa la visita de vecinos de la zona que se acercaban a dar un abrazo y palabras de apoyo en tan difícil momento familiar.

"Nosotros somos siete hermanos y Maxi era el segundo hermano mayor. Hoy cumpliría años y por eso es aún más doloroso todo esto, unos días antes estábamos organizando algo para comer con mis tías y eso, pero justo vamos a estar velándolo quizás en su cumpleaños. Es horrible esto".

Por último, y no menos importante, Carlos pidió encarecidamente en nombre de su familia que la Justicia actué con todo el peso de la ley y que el responsable pagué por sus acciones. "Mi hermano nunca tuvo un mal pensamiento de hacerle algo malo a alguien, y mas a este chico que se crio con nosotros. Ojalá que se haga justicia y no que por ser menor pueda estar matando libremente por ahi".

*Con colaboración de Corresponsalía de Eldorado: Matías Bordón