Concedieron la excarcelación al Chino Torres bajo caución real

A casi una semana de haber sido indagado en la causa que se le sigue por haber desobedecido las restricciones que le impedían acercarse a seis jóvenes que en octubre pasado lo había denunciaron por abuso, acoso y maltrato, el Juzgado de Instrucción Siete de Posadas accedió recientemente al pedido de excarcelación que la defensa de Héctor Chino Torres (60) había presentado ante el titular del mencionado juzgado, el juez Miguel Mattos.

Según confirmaron fuentes cercanas a la investigación, el magistrado interviniente hizo lugar al requerimiento defensivo, no obstante, se aclaró que Mattos requirió como condición excluyente que para que se haga efectivo el beneficio se deba abonar una caución real y cuyo monto no trascendió.

Es por ello que hasta que el acusado no solvente el valor de la caución continuará detenido en la comisaría Tercera de la capital provincial, dependencia en la que está alojado desde el pasado lunes 8 de enero. Y sobre esto, hasta esta tarde las fuentes no habían informado novedades sobre este último punto.

Cabe recordar que Torres fue trasladado al Juzgado de Instrucción Siete el pasado viernes, en donde por segunda oportunidad eligió el silencio. Allí, fue notificado de la imputación por desobediencia judicial.

El motivo que llevó a Torres a ser detenido por segunda vez tras su primer arresto a mediados de octubre pasado se produjo el pasado viernes 5 de enero en el Club Jorge Gibson Brown de Posadas. Es decir, varias semanas después de haber sido beneficiado con le excarcelación por parte del Juzgado de Instrucción Dos y que interviene por las acusaciones presentadas por las exjugadoras del implicado y que lo denunciaron por maltrato, acoso y abuso.

Aunque para ello, el juez Juan Manuel Monte había dispuesto que el hombre no pueda acercarse ni mantener ningún tipo de contacto con sus denunciantes por un radio de 500 metros.

Desobediencia judicial
De acuerdo a las investigaciones, Torres organizó y presenció un encuentro de fútbol de carácter solidario, a principios de enero, en el estadio de Villa Urquiza y del que participaron reconocidos jugadores del ambiente local, tanto activos como retirados.

Pero a pocas cuadras de la cancha vive una de las seis jóvenes que el 17 de octubre pasado denunciaron a Torres por reiterados hechos de maltrato, acoso y abuso. Y que derivó en una presentación policial ante la Comisaría de la Mujer de Itaembé Miní.

Según consignaron fuentes del caso, el acusado tenía pleno conocimiento de que una de sus denunciantes vivía a pocos metros del estadio verdirrojo y sin embargo presenció el citado partido solidario en el que incluso la misma denunciante estaba presente.

Fue a partir de una serie de imágenes y videos que la madre de la joven presentó ante la seccional Tercera ese mismo viernes que se celebró el encuentro de fútbol en el Brown que se inició el expediente por desobediencia judicial contra el entrenador. Pero cuando una comisión policial fue al estadio a constatar la denuncia, Torres abandonó el lugar en su vehículo particular.

Aunque ese mismo finde de semana, el juez Mattos como titular del Juzgado de Instrucción Siete en turno, ordenó que Torres sea nuevamente detenido por desobedecer la restricción que en diciembre se le había impuesto y que generó mucho repudio en las familias y allegados a las seis jóvenes que lo denunciaron en primera instancia ante la Justicia.