Cuáles son los mejores repelentes caseros para los mosquitos

Después de las lluvias de los últimos días aparecieron los mosquitos en gran parte de los barrios de la Ciudad y se siente notoriamente su presencia en los espacios abiertos o en los lugares donde hay plantas o pasto, por eso es importante conocer algunos métodos sencillos para alejarlos y evitar sus picaduras.

Los casos de dengue son una preocupación para el sistema de salud y la población en general, debido a las consecuencias que genera la picadura de un mosquito infectado; y una manera de protegerse de este peligro es ahuyentándolos con métodos naturales y caseros, a modo de repelente. Las plantas aromáticas, algunas especies específicas, y los preparados con ingredientes que suele haber en el hogar, son dos alternativas efectivas a la hora de combatir a los mosquitos.

 Citronela
Esta planta aromática posee una propiedad repelente natural de insectos. Con este fin, la citronela es utilizada en diferentes productos, como insecticidas, pulseras y fórmulas para el cuerpo. Este repelente natural es tan efectivo para los mosquitos y amigable para las personas, que se prepara en lociones para bebés, que aún no pueden usar otros productos comerciales.  La planta de citronela permite mantener a los mosquitos fuera del alcance, e incluso se usa en forma de aceite para colocar en los clásicos hornitos y dispersar el aroma en los diferentes ambientes de la casa.

Preparado con citronela
Otra forma es hervir medio litro de agua y luego colocar cinco hojas de citronela fresca, dejar por 10 minutos en el fuego y luego dejar que se enfríe. Posteriormente, se debe colar la preparación y colocarla en un atomizador para distribuir en los ambientes o en las prendas.

 Otras plantas para usar como repelente
Existen otras especies de plantas que ayudan a ahuyentar los insectos, como por ejemplo, la lavanda, menta, salvia, tomillo, albahaca, el geranio limón, la ruda y el clavel chino. Se aconseja ubicarlas estratégicamente cerca de las ventanas del hogar, de manera que su olor sirva como repelente.

Vinagre de alcohol
Este es uno de los elementos utilizado tanto en gastronomía como en limpieza para desinfectar, desengrasar y dar brillo a superficies. El olor fuerte del vinagre ayuda a ahuyentar a los mosquitos, por lo que se aconseja ubicar recipientes en puntos claves del hogar como puertas y ventanas, para mantenerlos alejados. La solución deberá tener una parte de vinagre y una de agua, y ser cambiada cada vez que se ponga turbia o acumule suciedad.

Trampa casera
Con elementos sencillos se puede crear este instrumento para atrapar a los mosquitos en un solo sitio, que deberá ubicarse cerca de ventanas y puertas o en los sitios de mayor concentración de insectos. Para fabricarla se deberá seguir los siguientes pasos:

 Cortar cuidadosamente una botella de plástico de dos litros, a una altura de 10 centímetros por debajo de la tapa.
Colocar en el recipiente inferior, que es el de la base, una mezcla de diez cucharadas de agua y tres de azúcar.
Ubicar la pieza recortada de manera invertida, de manera que el cuello de la botella se encuentre hacia abajo y sellar la unión con cinta adhesiva. Los mosquitos volarán hacia el interior por el azúcar del contenido, quedando atrapados.

Los métodos de prevención para alejar a los mosquitos
Las siguientes recomendaciones son útiles para evitar la concentración de mosquitos y, sobre todo, no atraer a los insectos portadores del dengue:

Dar vuelta botellas o baldes para evitar que se acumule agua.
Limpiar, cepillar y cambiar todos los días el agua de aquellos recipientes que contienen o acumulan agua, como el drenaje del aire acondicionado, floreros y bebederos de animales.
Tapar los recipientes que son utilizados para la recolección de agua, como tanques, barriles o toneles.
Tapar la pileta con una lona (que no acumule agua en los pliegues), tela mosquitera o guardarla debidamente seca.
Trasplantar las plantas que están en agua a una maceta con tierra, o ponerle arena húmeda en el portamaceta.
Colocar mosquiteros en las aberturas y tules sobre cunas y cochecitos de bebés.
Usar frecuentemente repelentes.
Utilizar ropa clara que cubra los brazos y las piernas, especialmente durante las actividades al aire libre.