Disminuye el consumo con elección de prioridades y cambios en las formas de pago

Este año fue marcado por una desaceleración en las ventas de varios rubros. En el caso de los electrodomésticos, ciertos productos como materiales eléctricos y artículos de iluminación mantuvieron su atractivo estacional para los consumidores, la venta de dispositivos tecnológicos experimenta un freno significativo. Además de priorizar los gastos, las personas eligen métodos de pago que incluyan financiación en sus compras.

En diálogo con Acá te lo Contamos por Radioactiva (100.7), el gerente de Electromisiones, Roberto Amarilla, indicó que “el volumen de venta medido en lo monetario se mantiene, pero en cantidades la baja es notoria. La gente siguió gastando en materiales eléctricos y en artículos de iluminación, aunque entendemos que es estacional, pero se ha frenado la venta de televisores, notebooks y celulares”.

A su vez, consideró que “la gente está priorizando los gastos, eligiendo en qué gastar hasta tener un panorama un poco más cierto”, consideró. “Si bien hay muchas consultas y la venta con tarjeta tiene un muy buen ritmo, ha caído la venta al contado, en un solo pago o con billeteras virtuales”, agregó.

“Aparte de priorizar el gasto, ha cambiado la forma de pago; la gente aprovecha la venta con tarjetas los días de promoción, de 4 o 6 cuotas sin intereses”, aseguró. En este sentido, hizo hincapié en que “las entidades bancarias también están leyendo que la gente está dejando de consumir y comenzaron, de a poco, a ofrecer nuevos planes”, al mismo tiempo que en la provincia se aprovechan los últimos días de los programas Ahora.

“En Electromisiones, al comprar bajo la figura del plan Ahora Construcción, se permiten hasta 6 cuotas sin intereses para las personas que tienen una tarjeta emitida por banco Macro. Banco Santander tiene 6 cuotas sin intereses todos los días lunes, Tarjeta Naranja tiene 4 cuotas sin intereses todos los días viernes hasta febrero. Y conseguimos para nuestros clientes un plan con tarjeta Naranja de hasta 12 cuotas a una tasa muy competitiva, casi tres veces más baja que el plan Ahora 12”, precisó.

Por otra parte, el gerente comercial señaló que “el aprovisionamiento de stock fue un tema muy complicado para todos los comerciantes en este último trimestre”. “Los que tenemos la suerte de conseguir de fábrica tenemos stock, pero las fábricas obligan a hacer grandes compras. Al pequeño comerciante le dificulta y termina comprando en proveedores, lo que le suma más costo”, analizó.

Asimismo, advirtió que la devaluación del dólar impacta de manera directa en los precios que abona el consumidor. “El comerciante no es formador de precios, sino que compra y luego revende. Hay que ser muy eficiente al momento de comprar para poder ofrecer beneficios a los clientes. La devaluación en los productos importados incide de manera directa porque lo que antes un comerciante compraba a un dólar oficial de $365, de un día para otro comenzó a comprarlo a $800 y ese precio se traslada al cliente. Fue un sacudón muy grande”, sopesó.

“Un celular Samsung S21 de $320.000, al otro día salía $1.100.000,00. Así en todos los productos. El que más componentes importados tiene, más porcentaje de devaluación siente de manera directa”, completó. A este escenario, se suma la competencia de ventas con países fronterizos, como Paraguay y Brasil. “Preocupa y mucho. Es algo a lo que los comerciantes de frontera estamos acostumbrados porque es una coyuntura nuestra, estacional. La mayoría de las veces, en los últimos tiempos, nosotros cruzábamos a comprar y ahora tuvimos una época en la que ellos venían. Llegó el momento de tratar de ser ágiles y dinámicos porque tenemos que
competir con Paraguay en calidad, servicio, garantía y financiación”, remarcó Amarilla.

“Es preocupante, pero ya sabemos cómo es y la financiación es fundamental porque la gente compra cada vez más con tarjeta. Hace rato competimos con comercios de Buenos Aires, Córdoba y Rosario porque, sobre todo los jóvenes, compran mucho por internet y comparan directamente con Mercadolibre. La competencia, siempre y cuando las reglas sean iguales para todos, viene bien”, concluyó.