En un final impresionante, River le ganó 1-0 a Atlético Tucumán en el Monumental y se prendió en la lucha por la clasificación a los cuartos de final de la Copa de la Liga Profesional.

En un partido que no dejó un juego vistoso y desesperó a los hinchas, el Millonario encontró el triunfo de manera agónica y respira.

A pesar de la victoria, el equipo de Demichelis no fue claro en ataque y casi no generó jugadas de peligro ante un Atlético con un planteo magistral. Además, en la parte defensiva volvió a dejar dudas y la más clara fue para el visitante.

El conjunto de Martín Demichelis se mostró más peligroso desde el inicio, pero su incidencia en los últimos metros sólo fue creciendo con el correr de los minutos.

Casi a la media hora amenazó Ramiro Funes Mori de cabeza pero enseguida Franco Armani tuvo trabajo ante un intento olímpico de Joaquín Pereyra.

Pero cerca del descanso llegó un nuevo asedio local con un remate de Nicolás De La Cruz que le quemó las manos a Tomás Marchiori y a los 46’, en los últimos segundos del minuto adicionado, llegaría la gran polémica.

Esequiel Barco lanzó un centro frontal que, tras un despeje defectuoso de Bruno Bianchi, le quedó a Paulo Díaz para que le reventara el arco a Marchiori. Pero el VAR metió la cola, Pablo Dóvalo revisó la jugada y terminó anulando el tanto tras largos minutos.

Primero, al trazar las líneas, quedaron muchas dudas sobre si el chileno no estaba en la misma línea que el último defensor. Después, la interpretación determinó que la intervención de Bianchi fue insuficiente como para considerarla un pase fallido a Díaz

En el complemento, en un clima tenso por los hinchas disconformes, el conjunto de Martín Demichelis intentó llegar mediante jugadas colectivas y una clara fue la de Miguel Borja, que rompió el arco a Tomás Marchiori, pero lo hizo en posición adelantada y Dóvalo anuló el tanto a instancias del VAR.

Luego el recién ingresado Salomón Rondón sacó provecho del quedo defensivo de Atlético Tucumán y definió solo entrando al área, pero el arquero visitante estaba bien ubicado y pudo controlar.

El equipo dirigido por la dupla  Orsi-Gómez avanzó con Mateo Coronel quien se encargó de realizar una exquisita jugada que terminó con un derechazo a colocar que pegó en el palo ante la mirada de Armani.

Pero sobre el final, Salomón Rondón rompió con el cero y en la última jugada del partido y de cabeza, selló el 1-0 en el Monumental.

El venezolano marcó el sexto gol del venezolano en 25 partidos en el Millonario, que sirvió para el triunfo y que extendió la buena racha de River en casa, que llegó a 18 triunfos consecutivos.

El domingo, a partir de las 21, el conjunto millonario visitará a Banfield, comprometido con la lucha por no descender, en lo que será la antesala del Superclásico, que se disputará el domingo 1 de octubre en la Bombonera.