En 9 meses se multiplicó el reingreso de menores judicializados o con adicciones al Cemoas de Oberá

En el primer año fueron ingresados un total de 70 NNyA, la mayoría habitantes de municipios de la zona centro y judicializados. El menor tiene 8 años y más de la mitad del total no cursa ningún nivel educativo.
miércoles 13 de septiembre de 2023 | 13:54hs.
En 9 meses se multiplicó el reingreso de menores judicializados o con adicciones al Cemoas de Oberá
En 9 meses se multiplicó el reingreso de menores judicializados o con adicciones al Cemoas de Oberá

El Centro Modelo de Asistencia y Seguimiento de Niños, Niñas y Adolescentes (NNyA) en conflicto con la Ley Penal (Cemoas) fue creado -por Ley XIV N° 14- el 18 de agosto del año pasado. El de Oberá es el segundo habilitado en la provincia y en el primer año fueron ingresados un total de 70 NNyA, la mayoría habitantes de la zona centro y judicializados en razón de haber cometido delitos o con problemas de adicciones.

De esa cantidad, 23 fueron casos abordados por especialistas en el Cemoas durante los últimos 3 meses de 2022, siendo 21 varones y 2 mujeres, pero además se detectaron 3 reingresos. En tanto que durante los 9 meses de este año suman 47 los ingresos, siendo 44 varones, 3 mujeres y hubo un marcado incremento de reingresos: 11. 

En cuanto a la escolaridad de los NNyA, solamente 11 asisten a la escuela, 40 no cursan ningún nivel educativo, 5 menores son analfabetos, 3 asisten a una escuela especial y hay 11 sobre los cuales no existen datos escolares. El más chico tiene 8 años, después van desde los 10 hasta los 17 años.

La información fue suministrada por el director del Cemoas, Gustavo Mello, en el marco del balance realizado esta mañana por cumplirse un año de la apertura del Centro. "Se trata de un espacio cuyo trabajo interdisciplinario e interinstitucional se encarga de garantizar el interés superior de los NNyA, en proceso penal provincial", enfatizó el funcionario, quien en esa línea destacó "el gran compromiso detrás de los trabajos con los menores", apuntando que "el abordaje no solamente se realiza a los niños sino también a las familias haciendo un acompañamiento".

Mello reivindicó que el Cemoas "brinda un espacio de calidad acorde a las necesidades poniendo siempre los derechos de los niños como interés superior en beneficio de la reinserción, sobre todo, mirando al niño como sujeto de derecho" y apuntaló "la contención, seguimiento y fortalecimiento familiar para prevenir la reincidencia en un trabajo interministerial e interdisciplinario a cargo de los Ministerios de Prevención de Adicciones y Control de Drogas y de Gobierno".

Contención, clave

"La contención desde el primer momento es clave para generar la empatía necesaria para el seguimiento y brindar la atención integral", analizó, y sobre eso acotó que "los profesionales se aseguran que el niño, niña o adolescente cuente con atención durante su tránsito por el Cemoas, y se abocan a cada caso en particular de manera exclusiva según la complejidad que requiera cada uno".

El trabajo articulado con distintas instituciones es esencial, entre ellos con la Pastoral de Adicciones de Oberá donde los participantes "encuentran un espacio exclusivo para formar parte de un grupo de apoyo promoviendo los hábitos saludables", donde asisten de manera alternada los lunes, miércoles y viernes. "Allí cuentan con un equipo de psicólogos, psicopedagogo, psiquiatra, médicos que brindan atención y acompañamiento integral".

Mello destacó además que el Cemoas trabaja articuladamente con los Centros de Día dependiente de la Municipalidad de Oberá y el Hogar de Día de la Subsecretaría de Atención Integral del Ministerio de Prevención, donde los menores realizan talleres de formación y diversas actividades preventivas, recreativas, deportes, apoyo escolar, fundamentales para trabajar los valores y hábitos saludables.

"El apoyo escolar y la reinserción educativa es también clave, si se tiene en cuenta que de la totalidad de los niños que ingresaron al Cemoas, más de la mitad no se encontraba escolarizado", lamentó, y en ese contexto elevó la importancia "del trabajo del personal que es un factor clave, de no ser por la comprensión, la empatía, el amor y la fe, que es lo que se requiere para un lugar complejo con chicos en situación de vulnerabilidad que necesitan una contención profesional".

Finalmente Mello mencionó como importante "el trabajo de revinculación y seguimiento" que realiza el equipo interdisciplinario no solamente con los jóvenes sino también con las familias en relación al fortalecimiento familiar y el empoderamiento de los adultos para la contención de sus hijos.

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