"Ahora empieza el torneo de verdad"
Comenzó una nueva semana para Crucero, que se alista para lo que será la 21ª fecha del torneo Federal A, instancia en la que visitará el fin de semana a Juventud Antoniana.
Cumplida con la fecha libre, los comandados por Carlos Macchi recargaron pilas de cara a los últimos quince juegos de la primera fase. Hoy el equipo marcha en el penúltimo escalón de la zona D a un punto del descenso directo pero a seis de los puestos clasificatorios.
Es una pelea por entrar al cielo y al infierno que el propio DT lo reconoce ante los micrófonos: “Ahora empieza el torneo de verdad. Será una instancia donde todos los partidos se pondrán duros”.
“Los equipos están con el rodaje suficiente y ya no pueden incorporar más. La zona está apretada, entonces tenemos que pensar en sumar para recuperar todos los puntos que perdimos. En dos fechas podés pelear arriba o abajo, es así de cambiante”, aseguró.
Para partir a tierras salteñas, el Colectivero ya sabe que contará con la vuelta de jugadores que estuvieron ausentes la fecha pasada por distintos motivos: los defensores Iván Benítez y Nicolás Portillo y el mediocampista Nicolás Fassino -cumplieron con la fecha de suspensión- y Matías Iglesias (se recuperó de una lesión). Éstos se suman a piezas ya recuperadas como la del ofensivo Catriel Weyreuter. El panorama entonces es más que positivo.
“Por suerte estamos recuperando a varios chicos. En este torneo sacan diferencias los que tienen recambio en el plantel, jugador por jugador y jerarquía por jerarquía. Si eso no ocurre se va a poner difícil”, reconoció Macchi.
“Al equipo lo veo más fluido y agresivo con la pelota. Nunca pudimos armar el mismo once y tampoco sumamos dos victorias al hilo. Tenemos que hacerlo para estar tranquilos”, cerró.
El Colectivero espera por la confirmación oficial del día y horario del encuentro. Obviamente que sobran las expectativas.
Con apenas 19 unidades en 17 presentaciones, Crucero espera torcer de una buena vez este rumbo que hoy no parece terminar en un buen puerto. Hoy es uno de los tres equipos más goleados de la zona, golpeado por una serie de resultados inesperados cuando se confeccionaba el plantel. Pero todavía hay tiempo de torcer la historia, dependerá de las ganas, de la voluntad.
