Cristian Ortiz, de Montecarlo, combina acuicultura con hidroponia

Tras un accidente, encontró en la acuaponía la terapia para sanar

Instaló en su casa tanques para la cría de peces para consumo. “Mi idea fue mostrar que en un espacio reducido se puede tener pescado y verduras frescas”, señaló
miércoles 22 de marzo de 2023 | 6:04hs.
Tras un accidente, encontró en la acuaponía la terapia para sanar
Tras un accidente, encontró en la acuaponía la terapia para sanar

Hace tres años que Cristian Ortiz (43) decidió poner en práctica la acuaponía, un sistema de cultivo de plantas y peces que combina la acuicultura tradicional con la hidroponia. Desde hace un año se dedica a ello de manera más intensa, como terapia después de haber sufrido un accidente en su domicilio. En la actualidad tiene una producción de peces en vistas a la Semana Santa y verduras para consumo familiar.

“Desde los 7 años, que es desde cuando tengo una pecera, me empecé a interesar por ese rubro y ya más grande empecé a adquirir conocimiento del tema. Esto surgió a raíz de un problema médico, estoy inactivo, como la estructura estaba encaminada antes de accidentarme, en el momento de recuperación aposté a esto. Yo no puedo hacer nada pesado, así que como terapia empecé a dedicarme a los peces y las verduras”, contó el pequeño productor.

Así fue como empezó a ampliar su producción de verduras, pero ante la falta de compradores y pérdida de mercadería decidió reducir la producción a consumo familiar y apostar más fuertemente a los peces no sólo para consumo, sino también para acuario.

“Montecarlo es especial, hacés algo natural, sin veneno, sin fertilizantes y al momento de comercializar la gente quiere que uno le regale. Pero los peces tienen más salida”, relató sobre la experiencia al comercializar la producción.

Las personas interesadas en adquirir algún pez lo visitan en su emprendimiento del barrio 9 de Julio, donde pueden ver de cerca la tarea que desarrolla hace tres años.

“Todo fue a pulmón, con lo poco que tenía se fue armando, no hay casi nada comprado, hay tanques que conseguí que estaban en desuso y los parché, las medias sombras no son enteras, están cosidas, el invernadero es de tacuara y costeros. Mi idea siempre fue mostrar que en un espacio reducido se puede tener pescado y verduras frescas para consumo familiar”, sostuvo.

Respecto de lo económico, si bien hay producción, le alcanza para cubrir gastos del emprendimiento y hacer pequeñas inversiones; es importante aclarar que no es su principal fuente de ingreso en la actualidad.

Además no recibe ningún tipo de ayuda para fortalecer su emprendimiento. Según explicó, adquirió los conocimientos de Microbiología a través de una docente y más adelante se pudo capacitar en San Pablo, Brasil. También fue parte de talleres intensivos de piscicultura en Itaipú y del Inta de Monte Vera, Santa Fe, que trabaja con este modelo de producción con las escuelas rurales.

Para Semana Santa estima que podría tener alrededor de 40 pacúes a la venta. Además este año implementó la producción de tilapia, boga y cuenta con una variedad de peces para peceras.

¿Que opinión tenés sobre esta nota?