El resucitado

domingo 05 de marzo de 2023 | 4:06hs.
El resucitado
El resucitado

Transitar en la provincia de Misiones, desde Eldorado a San Pedro por camino de barro, angosto y sinuoso ya es una pesadilla y, tener que hacerlo con el difunto, largo, cuyos pies continuamente molestan al manipular la palanca de cambios del colectivo, tanto peor. Escuchar el llanto silencioso de la viuda en el primer asiento, entristece hasta al pasillo cubierto de bolsas, maletas, cajas con variadas provisiones y compras de los pasajeros que viajan apretados y encimados. Se escucha gritar — ¡Parada chofer! ¡Deténgase, debo descender!

Si es difícil conducir, es mucho más detener a un colectivo en medio de precipicios, camino angosto, encima mojado, aminorar la marcha y frenar al hallar el lugar, apropiado. El pasajero quiere bajar, con sus bultos, intenta apearse por la puerta delantera, le parece deshonroso hacerlo cruzando por encima del cadáver. Mira la puerta trasera y todas las personas con sus pertenencias comienzan a desmontar para que él, al final lo logre. Y nuevamente el ascenso de los ocupantes.

Se cierra la puerta y reanuda la marcha. Hasta la próxima detención donde se repite el ritual.
Al llegar frente a la casa del muerto, como si supiera, éste se incorpora quedando sentado en el piso del ómnibus. En un parpadear, dentro del habitáculo no queda nadie, tampoco el chofer y el colectivo comienza a rodar. El finado, sin entender, ni dudar, ocupa el lugar del conductor evitando que caiga al abismo y salvarse de una muerte segura.

Ana Barchuk de Rodríguez

El cuento es parte del libro Relatos de colectiveros.

Barchuk es fundadora de AELIJUM

Asociación de Escritores de Literatura Infantil y Juvenil de Misiones

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