El siniestro ocurrió en la madrugada del pasado 10 de febrero en el barrio Los Patitos
La familia del policía atropellado marchará hoy pidiendo justicia
Allegados a Ángel Grance (37) aseguran que la colisión que se cobró la vida del efectivo estuvo premeditada. Además, denunciaron amenazas del conductor de la camioneta

Tras el fallecimiento de un efectivo de la Policía de Misiones identificado como Ángel Silvestre Grance de 37 años, quien fue atropellado en la madrugada del 10 de febrero por un hombre que conducía alcoholizado, familiares y vecinos de la víctima se manifestarán hoy para pedir justicia. Es que, según aseguraron desde el entorno de Grance, no se trató de un accidente, sino que la colisión estuvo premeditada por el conductor de la camioneta F100, Carlos B., quien impactó su vehículo contra la motocicleta del suboficial en el barrio Los Patitos de Posadas.
La concentración de la marcha se realizará a partir de las 8.30 en el Monumento El Mástil, ubicado en las avenidas Uruguay y Mitre, para luego dirigirse hacia el Juzgado de Instrucción Seis. Allí, exigirán justicia y explicaciones del por qué el acusado fue liberado.
Por el hecho, Mario Grance, hermano de la víctima, expresó a este matutino que “el asesino lo pensó, lo esperó y se ensañó apagando las luces de la camioneta. Lanzándose intencionalmente para ejecutar a Ángel”.
Además, alegó que el imputado por la causa de “homicidio culposo en accidente de tránsito” vive enfrente de la casa de Ángel, en el barrio Néstor Kirchner y que meses atrás le había robado las pertenencias de la casa de su familiar.
Mario agregó que el acusado amenaza a la familia para que dejen de pedir justicia. ya que el último viernes “mandó a un motociclista a amenazarme cuando estaba llegando a mi casa. El desconocido me advirtió que dejemos de molestar a Carlos, porque sino me iba a quemar la casa”, indicó el hermano de Ángel, quien señaló que al trabajar de noche el miedo de volver a ser abordado está.
También señaló que hace unos días su madre asistió a la casa de Ángel para ver en qué estado se encontraba. En ese momento, se presentó el imputado, para advertirle que se cuiden, porque iba a entrar en su domicilio e iba a violar a su hija. Situación que puso en shock a la mujer.
Tanto fue el temor que desde ese día las puertas del domicilio de la madre de Ángel se encuentran con candado y rejas.
Por otra parte, el entrevistado expresó que todavía no entienden cómo el homicida de su hermano continúa libre. Señaló que se sienten desamparados y que “la justicia actuó mal por liberar y dejar libre a un tipo que es peligroso”.
Por último, Grance manifestó a El Territorio que “quiero que sepan que si me pasa algo, fue él”, aludiendo que se sienten solos, sin apoyo policial, ya que alertó que “al solicitar custodia, no nos brindaron la ayuda”.
En esa línea, Alberto Grance, otro hermano de Ángel, ratificó que luchan para esclarecer lo sucedido. Este último, aseguró que “no fue un accidente, a mi hermano lo atropelló un malviviente que le apedreó la casa y lo amenazaba constantemente. Lo insultaba por ser policía y lo amenazaba con que le iba a chocar la moto”.
“Sigo sin creer que no se investigue que lo mató la misma persona que lo tenía amenazado, que le entró a robar a la casa. Es llamativo que no se investigue esto, no fue un accidente, fue intencional” cerró.
El caso quedó caratulado como “homicidio culposo en siniestro vial”, por lo que Carlos B, quien arrojó 1,94 gramos de alcohol por litro de sangre en el momento del siniestro, permaneció detenido seis días.
Tras declarar y dar su versión controvertida en donde apuntó a un error propio al apagar el motor de la camioneta para ahorrar combustible y no poder frenar a tiempo, el juez Balor le otorgó la excarcelación bajo caución. Por lo que el conductor volvió a su casa con la imputación provisoria, cuya pena prevista va de tres a seis años de prisión.