El fútbol, pasión y puente entre culturas

La pasión por jugar a la pelota hermana, refugia y genera entendimiento aún entre quienes vienen de tierras lejanas con costumbres y lenguas muy diferentes. 

De esa manera entienden el fútbol los integrantes de FC Corcoran’s, un equipo amateur surgido en París hace 20 años y que en cada partido tiende puentes de unión y amistad con locales y extranjeros.

La formación, con su capitán al frente, Dominic O’Shea, se encuentra por estos días de gira deportiva por Argentina. Una aventura trasatlántica con trama futbolera, intercambio cultural y visitas a sitios turísticos, históricos y naturales.

En la tierra colorada 

El combinado francés tiene un capítulo misionero, para medirse con varios exponentes locales en la capital provincial y en Puerto Iguazú. Ayer, a horas de su arribo a Posadas, el FC Corcoran’s salió a la cancha por la mañana en el campo de la Asociación Civil de Equipos de Fútbol Amateur (Acefa) y a la siesta en Crucero del Norte para enfrentar a República y El Territorio, ambos de la Súper Liga.  

En una charla con El Territorio, Sebastián Fernández, el argentino en la comitiva de amigos integrada por 30 personas de diferentes nacionalidades, explicó acerca de este club de fútbol con características únicas y de los valores que promueve como inspiración y bandera.

“El club, con el capitán Dominic siempre a la cabeza, organiza escapadas para jugar al fútbol por ciudades de Europa, pero son viajes cortos. Y era un sueño de Dominic poder hacer un viaje más largo y conocer un país, recorrer, jugar al fútbol y conocer más la cultura, la gente, ese era el proyecto que se está haciendo realidad ahora”, contó el joven bonaerense que en un momento fue parte del equipo y hoy ayuda en la logística y comunicación, entre otras cuestiones organizativas.

Cuando sobrevino el Covid y nadie podía salir de casa, una idea tomó fuerza y dio ánimo para enfrentar con esperanza ese tiempo difícil. “En pandemia los chicos comenzaron a ahorrar para el viaje, nos empezamos a organizar de a poco, a buscar información, no sabíamos cuándo iba a terminar todo eso del virus, pero teníamos la esperanza de que cuando todo mejorara saldríamos juntos de viaje a jugar al fútbol”, explicó Dominic en la traducción de Fernández.

Fútbol y amistad, banderas del equipo surgido en París que visita Misiones.

Destacó que se eligió Argentina como destino “porque queríamos venir a una tierra que sienta el fútbol como nosotros, que vivan el fútbol con ese amor y esa pasión, eso es algo que tenemos en común”. En este punto se recordó la muy fresca final del campeonato del mundo, “es algo difícil, claro que a los que somos franceses nos gustaría algún día tener una revancha de ese gran partido contra la Argentina. Pero, por otro lado, ver a Messi levantar la copa fue emocionante, Messi es muy querido y verlo cumplir su objetivo fue algo bueno también”, reflexionó Dominic.   

Travesía y tribunas

La travesía comenzó hace unos días en Buenos Aires, la delegación recorrió la capital del país, fue a la cancha a ver Huracán y Barracas Central, gritó los goles y también jugó algunos amistosos. Luego, los amigos pasaron por Entre Ríos, vieron el carnaval y el domingo a la noche llegaron a Posadas.

Mañana, el balón los conducirá hacia el Norte provincial, quieren conocer Cataratas y otros atractivos y también jugarán contra un equipo iguazuense.

“El grupo está feliz de todo lo que están viendo, yo, que soy argentino, no conocía el carnaval de Gualeguaychú ni tampoco había venido antes a Misiones, y todo lo que vemos es hermoso, la gente es muy buena, la experiencia está siendo muy linda”, describió Fernández.

Abrazo de bienvenida

Fernández contó que él emigró por trabajo a Francia en 2009 y que no conocía el idioma ni tenía conocidos, sí hablaba inglés. “Por una chica argentina que tenía un esposo sueco que había jugado en el equipo llegué al club, y fue como sentirme entre familia y amigos. Es importantísimo para alguien que recién llega y que siente esa soledad poder tener gente que te da la mano, que da un abrazo de bienvenida, un abrazo de gol”, consideró.       

Acerca de los lazos forjados en el club, ejemplificó que de la delegación de viajeros, 17 juegan en el equipo y el resto ya no, porque se han mudado a otras ciudades. “Yo ya no juego y lo mismo pasa con otros chicos, pero seguimos en contacto, la amistad es tan grande que a este viaje se sumaron chicos que hoy viven en Canadá y en Taiwán”.

En este sentido, remarcó que todo se hace a pulmón. “El motor y pegamento de este grupo fantástico de locos por el fútbol es Dominic, y nosotros lo seguimos porque es muy inspirador y porque uno lleva a los amigos siempre en el corazón”, finalizó Fernández.