Vigente con la albiceleste
La montecarlense Mara López (15) vivió una experiencia deportiva de excelencia al sumarse a los entrenamientos de la selección argentina juvenil de handball en el Centro Nacional de Alto Rendimiento Deportivo (Cenard), en Buenos Aires. Y además, es un premio a su vigencia, sostenido por su trabajo, ya que viene siendo parte del equipo desde Cadetes.
“Practicar en el Cenard fue algo único”, compartió contenta la jugadora de la cantera del Club de Gimnasia de Montecarlo.
Además, para ella fue una oportunidad para “conocer a todos, la dinámica de estar ahí adentro fue muy linda y estuve muy enfocada”.
Para la misionera vestir la celeste y blanca se da por segunda vez ya que viene siendo convocada desde Cadetes en la selección. “Todo empezó por el proyecto ‘Futuro 2028’ en el cual quedé seleccionada en el equipo nacional de Cadetes. Éste proyecto trata de potenciar el handball a nivel país”, explicó.
Y en esa oportunidad, Mara tuvo la chance de jugar y ser parte del Torneo Sur-Centro representando al país por lo que se viene sosteniendo en el proyecto nacional
Sin embargo, la misionera marcó la diferencia de este reciente entrenamiento en Juveniles, que culminó la semana pasada. “Fue muy diferente más que nada en la metodología, y los tiempos; y aunque venía entrenando mucho, fue exigente”. Acerca del llamado, que se dio el 7 de enero para convocarla a la selección, Mara señaló que “es un verdadero orgullo y felicidad. Poder estar en este nivel con una categoría mayor, es muy fuerte”, dijo emocionada.
Luego agregó que “cuando en enero me avisan de la Federación Misionera que estoy en la lista de 16 jugadoras convocadas nuevamente para la selección en juveniles y junior, me puse contentísima. Es grandioso poder estar en el Cenard, que es templo del deporte argentino, representando a mi club, a Montecarlo y mi provincia, llevando el handball femenino a la selección”.
Mara trabajó duro la semana pasada con el equipo juvenil en el Cenard.
La destacada deportista, juega desde los 6 años. Dio sus primeros pasos en esta disciplina en escuela de iniciación deportiva municipal, teniendo como profesora a su mamá, Susana Alfonzo, quien fue un pilar clave para la vigencia y el desarrollo a pasos agigantados que tuvo Mara en este deporte, que lo practica toda su familia.
Es que al ver que tenía potencial, la montecarlense empezó a entrenar en el Club Gimnasia de Montecarlo donde trabaja bajo el ala del DT Claudio Roda.
“La convocatoria para la selección de Cadetes fue el 19 de agosto del 2022, y ya venía entrenando fuerte desde comienzo de año junto a mi club. Después la convocatoria de Juveniles fue a inicios de enero de este 2023 y entrené durante todas las vacaciones yendo al gimnasio y en particular con mi mamá”, relató sobre su puesta a punto para estar a la altura.
Es que vestir la camiseta del país es la meta de todo deportista y Mara se ganó con esfuerzo este premio. “Formar parte de la selección es un orgullo inmenso y sobre todo saber que estoy representando a mi país en este deporte que es mi pasión. Aparte es algo que era un sueño desde que comencé y llegar acá es sin duda una meta cumplida”.
Ahora su meta mutó, pero sólo para seguir en alza: “Espero seguir con dedicación y esfuerzo para así llegar a la selección mayor”.
Previo a la convocatoria en el Cenard, Mara fue parte de un campus en el club Gimnasia de Montecarlo, a cargo del entrenador de la selección Argentina, Eduardo “Dady” Gallardo, y fue allí que la vieron y la convocaron a una pre selección, junto a 43 chicas, siendo la única jugadora de la región litoral. Luego la misionera, que juega de lateral izquierdo, quedó firme dentro de las 32 jugadoras que representaron a la Argentina en el torneo Sur-Centro de Cadetes y pudo jugar con Brasil, Paraguay, Uruguay y Chile.
Y como frutilla del postre, Mara es una destacada jugadora de vóley del Club Germano Argentina de Leandro N. Alem, una todoterreno que vive el deporte a pleno.
