Cayó el acompañante de Keko Sotelo por la balacera frente a la iglesia

El tiroteo frente a la iglesia Sagrada Familia de Posadas en enero de este año forma parte, cual serie de plataforma, de uno de tantos capítulos que reflejan la disputa del hampa posadeña por motivos que, más allá de las sospechas, aún no están del todo claros.

En este sentido, se podría decir que en la noche del miércoles se registró un nuevo episodio, esta vez con la detención de uno de los prófugos que tenía la secuencia, el presunto acompañante de Keko Sotelo, quien terminó falleciendo días después del enfrentamiento en el Hospital Madariaga.

Se trata de Luis Alberto R. (42), conocido como Piojo, quien fue ubicado por la Dirección de Homicidios de la Policía de Misiones en el barrio San Isidro de la capital provincial. El nuevo implicado no se salió del  violento guión porque resistió su aprehensión a los tiros, según consignaron ayer fuentes de la fuerza provincial.

Todo ocurrió cerca de las 21.30 sobre la calle 186 A. Los investigadores tenían la información de que se podría encontrar en el lugar y montaron una vigilancia que tuvo resultado positivo. Sin embargo, cuando fueron a abordarlo Piojo se percató y empezó a disparar para poder escapar.

El acusado le disparó a los efectivos de la Policía de Misiones.

Por fortuna las balas no hirieron a nadie y no pudo ir muy lejos. Buscó ocultar el arma arrojándola al techo de la vivienda,  pero esta fue secuestrada por la Policía Científica. Dedido a esto, además del hecho por el cual era buscado tendrá que enfrentar una causa por resistencia a la autoridad, abuso y tenencia ilegal de arma de fuego.

El implicado quedó a disposición del Juzgado de Instrucción Uno de Posadas, a cargo del juez Marcelo Cardozo, quien lleva la causa por la muerte de Keko y que por el momento tiene a otras dos personas detenidas, entre ellos el autor del disparo que le quitó la vida al mayor de los Sotelo.

En los próximos días se deberá definir cuándo va a pasar a declaración indagatoria en la que tendrá la posibilidad de dar su versión de los hechos.

Trilogía

Los hechos investigados ocurrieron el jueves 27 de enero  en la plazoleta de la avenida Roque Sáenz Peña de Posadas , frente a la iglesia mencionada. Se reconstruyó que un minuto después de la 16, el Ford Ka ingresó a la avenida Roque Sáenz Peña y se detuvo en medio de la calzada entre las equinas de Salta y Tucumán, justo enfrente a la parroquia Sagrada Familia de Posadas.

El vehículo, según lo reconstruido, era ocupado al menos por Keko y Piojo. Allí inmediatamente se bajó el acompañante y, sin mediar palabras, abrió fuego hacia la plaza saludable del lugar, donde estaba una pareja de un hombre y una mujer.

Ambos salieron corriendo, momento en el cual un joven llamado Joel Pereyra (25), quien sabía que lo estaban buscando, extrajo de sus prendas un arma de fuego y repelió la agresión, aunque al parecer con más puntería. Entonces hirió de gravedad a Sotelo.

La llamada ingresó a las 16.11 al sistema Centro Integral de Operaciones, que rápidamente avisó a todas las unidades y centró su atención en las cámaras de seguridad de la zona. Una patrulla que estaba cerca llegó rápidamente, cuando los ocupantes del auto y la pareja que se habían escapado del sitio.

El herido llegó al centro asistencial en un Ford Ka azul en compañía de su hermano, Marcos David Sotelo (32), quien quedó detenido a disposición de la Justicia por su presunta participación en el hecho. Sin embargo al día siguiente se determinó su libertad en razón que la parafina fue negativa, caso contrario al de su hermano malherido, que permaneció internado con custodia policial.

Inmediatamente afloraron los antecedentes. Marcos David había sido atacado a tiros una semana antes, durante  la madrugada del miércoles 19, en el barrio A 3-2, recibiendo un disparo en la pierna. Es por eso que la principal hipótesis es que los dos hechos estén relacionados y todo se enmarque en una disputa de bandas.

Tanto el fallecido Keko como Marcos son a su vez primos de Cristian “Casimiro” Sotelo (40), quien fue asesinado a balazos en el mismo barrio el 13 de junio del año pasado. En su momento Casimiro fue trasladado al hospital en el mismo Ford Ka. La vez que lo asesinaron, Marcos también estaba entonces en la escena y se salvó de ser alcanzado por las balas.

Por este último caso mencionado están detenidos  Garrafero, Juan Carlos “Pitoka”, Germán “Belco” I. (25) y Diego “Cafú” T, todos con prisión preventiva. Se cree que Garrafero es la banda opuesta a los Sotelo y que el conflicto podría estar ligado al narcotráfico. 

Queda claro que, más allá de las comparaciones y los paralelismos, no se trata de ficción. Es una seguidilla violenta, un reguero de balas y sangre que hasta el momento dejó dos muertos.

El 2 de febrero a la noche Joel Pereyra (25) fue detenido en la localidad de San Javier. El procedimiento lo realizó la Brigada de Investigaciones local, tras un trabajo conjunto con la División de Investigaciones de la Unidad Regional I de Posadas. Horas antes, desde la clandestinidad, había hablado con El Territorio

Horas después, en la mañana del día siguiente, se confirmó el fallecimiento en terapia intensiva de Sotelo, por lo que su situación procesal cambió. Hoy está con prisión preventiva en una cárcel perteneciente al Servicio Penitenciario Provincial.