Una ciudad vacía con bares colmados que sufrió una derrota impensada

miércoles 23 de noviembre de 2022 | 6:01hs.

Los posadeños que tuvieron que salir de su casa a la hora del debut de la selección argentina en el Mundial se encontraron con calles desoladas y una ciudad vacía.

Un viaje de Villa Cabello al centro, que habitualmente se hace en 10 minutos por una avenida de mano única, ayer se hizo en 5’, ya que no había autos circulando y los colectivos iban prácticamente vacíos. En el centro, sólo los bares estaban colmados de hinchas con camisetas celeste y blanca y en algunos negocios había cartelitos de “atendemos después de Argentina-Arabia Saudita”. En los pocos que estuvieron abiertos, la TV fue el centro de la escena y los decorados de celeste y blanco estuvieron a la orden del día.

Las escuelas céntricas se mostraron vacías y no había la tradicional doble fila frente a los colegios. Los pocos autos circulando estaban con las radios a pleno y se podía escuchar el partido desde las veredas. Por la avenida Corrientes, unos pocos cumplían con la rutina de salir a caminar, eso sí, con auriculares puestos.

El gol de Messi se escuchó por la ventana de los edificios que parecían tomar vida y sumarse a la ilusión de todos los argentinos. La misma situación se vivió con los tres goles anulados por el VAR. Pero el silencio se apoderó de la ciudad en los 7 minutos fatales que tuvo la Scaloneta. El pitazo final se escuchó desde lejos y también algún que otro insulto.

La ciudad de Posadas recién empezó a retomar su habitual ritmo mañanero una vez concretada la derrota en el debut del Mundial. Las caras largas denotaban la decepción de los misioneros, que vivieron una derrota inesperada en el inicio de la semana laboral en medio del Mundial de Qatar.

En la Facultad de Humanidades sufrieron con la derrota. Foto: Marcelo Rodríguez