Una pareja comenzó a ser juzgada esta mañana por el asesinato de su propio hijo, Oscar Dos Santos, de apenas tres meses de edad, perpetrado a principios de enero del año pasado y cuyo cadáver enterraron en un pozo de poca profundidad a orillas del arroyo Barrero, zona conocida en Picada Lamadrid situada entre las localidades de San Martín de Tours y General Alvear.

El debate oral se desarrolla desde las 8.30 en el Tribunal Penal Uno de Oberá. Karina Beatriz Dos Santos (24) y Héctor Oscar Dos Santos (33) están sentados en el banquillo bajo los cargos de homicidio agravado por el vínculo, que prevé la máxima pena.

Ella es asistida por el defensor oficial Matías Olivera y él por dos abogados particulares, en tanto que de la acusación está a cargo la fiscal Estela Salguero. El triunvirato de jueces esta integrado por Francisco Aguirre, José Pablo Rivero y Jorge Villalba (subrogante).

Como anticipó El Territorio, el primer indicio de infanticidio fue la sospecha de la desaparición del bebé que surgió el 7 de enero del año pasado, cuando su madre fue apresada en el marco de la investigación por una serie de hurtos y robos perpetrados en la zona rural de Colonia Alberdi.

Estando privada de la libertad tardó cinco días en confesar que el niño estaba muerto. Luego aseguró que su concubino lo mató a golpes y ella misma guió a la Policía hasta el lugar del macabro hecho, detallando el sitio en el cual lo habían enterrado.

Posteriormente, la autopsia confirmó que la víctima sufrió una “muerte violenta por traumatismo cráneo encefálico gravísimo”.

El cadáver estaba envuelto en una manta, sepultado a una profundidad de 60 centímetros, aproximadamente, a orillas del arroyo Barrero.

El bebé había nacido el 19 de septiembre del 2020 en perfecto estado de salud.