Destellos y goles rumbo a un mundial que ilusiona

El Hard Rock Stadium de Miami, Estados Unidos, vivió una verdadera fiesta con Lionel Messi y la selección argentina, que venció con facilidad 3-0 a Honduras en uno de los últimos amistosos antes del Mundial de Qatar. El capitán, por duplicado, y Lautaro Martínez convirtieron para el campeón de la Copa América, que ofreció momentos de buen fútbol y estiró su invicto a 34 encuentros.

La diferencia de jerarquía se notó desde los primeros compases del encuentro. Los hondureños buscaron oponer orden al poderío albiceleste. Obediente, el equipo pasó siempre la línea de la pelota cuando no tuvo el balón y Castellanos le hizo marca personal a Messi, para no dejarlo pensar. Sin embargo, por momentos le dio aire, tomándolo a cierta distancia. Y eso terminó siendo letal.

El juego fue una sucesión de acciones de riesgo para Argentina, que movió la pelota con paciencia y fue agresivo al presionar.

A los 15’ se rompió la resistencia: la Pulga dio el paso atrás para alejarse de Castellanos y le regaló a Gómez un pase delicioso a la carrera. El del Sevilla envió el buscapié y Lautaro Martínez firmó el 1-0.

Más allá de un enganche y zurdazo de Messi que contuvo el guardameta López, el choque entró en un bache. Y además florecieron los roces, por impotencia o por diferencia de nivel, de parte de los jugadores hondureños.

Messi participó de todos los goles de Argentina y se mostró muy suelto en Miami. foto: afa

Pero bastó con que se despertara Messi para que el marcador se ampliara antes del descanso. A los 45’, el ‘10’ soltó un pase a Lo Celso, que entró como wing al área. Santos lo camiseteó y el árbitro sancionó penal. Un minuto después, el capitán ofreció una definición sutil para el 2-0.

Scaloni había prometido que usaría el duelo como plataforma de pruebas y en el entretiempo cumplió. Primero hizo entrar a Julián Álvarez y a Thiago Almada (debut absoluto en el combinado mayor), y luego les dio chances a Enzo Fernández y Nehuén Pérez. También hubo espacio para Alexis MacAllister y Ángel Correa. Sin la presión del resultado ni la oposición fuerte del adversario, Argentina hilvanó algunas jugadas de gran nivel estético que merecieron culminar en la red.

Messi pareció obsesionado con devolverle el precio de la entrada a los casi 70.000 espectadores en el estadio. Y, a 22 minutos del epílogo, lo consiguió. Presionó Enzo Fernández y dejó a la Pulga en posición de marcharse cara a cara con el portero. Sin embargo, optó por tomar un atajo y dibujar una vaselina preciosa por encima del arquero para rubricar el 3-0.

El marcador pudo ser todavía más contundente. Enzo Fernández, que ingresó con el mismo desparpajo que mostraba en Defensa y Justicia o River, reventó el palo. En otra acción, Ángel Correa pasó entre dos y López rechazó con los pies.

El amistoso, casi un entrenamiento a estadio completo, le sirvió a Argentina para reencontrarse y a Scaloni para sacar algunas conclusiones. El interesante aporte del Papu Gómez, el buen rendimiento de los laterales. Los pujantes ingresos de Almada, Enzo Fernández y Correa.

Este fue el anteúltimo amistoso de la Selección antes del Mundial de Qatar. El próximo será el martes, también a las 21 horas, pero en Nueva York y contra Jamaica y el último está pactado para el 16 de noviembre, seis días antes del debut en la Copa del Mundo, ante Emiratos Árabes.

Romero consiguió la visa y viajó a Estados Unidos

El zaguero central Cristian ‘Cuti’ Romero obtuvo finalmente el visado correspondiente y viajó rumbo a Estados Unidos para unirse al seleccionado argentino, que el martes jugará ante Jamaica un amistoso de preparación para Qatar 2022.

El defensor cordobés resolvió los inconvenientes migratorios que se le habían presentado para ingresar al país norteamericano y desde hoy estará a disposición del DT Lionel Scaloni.

El actual jugador de Tottenham no había podido cumplimentar con los trámites requeridos para entrar a Estados Unidos, debido a que cuando quiso hacerlos en el Reino Unido se había decretado duelo por diez días, a raíz de la muerte de la reina Isabel II.

La misma situación atravesó el defensor Lisandro Martínez, aunque el entrerriano pudo solucionar el problema con anterioridad y siempre entrenó con el plantel en Miami.