Controles frecuentes, la clave para la detección temprana del Cáncer de Tiroides

La tiroides es una glándula que se encuentra ubicada en la parte anterior del cuello y su función consiste en enviar hormonas a la sangre además de mantener el organismo de la persona sano. Las enfermedades vinculadas a esta glándula ocurren por aumento o descenso de las hormonas por lo que especialistas recomiendan realizarse los controles una vez al año.

Este 24 de septiembre es el Día Mundial del Cáncer de Tiroides, "fecha que es utilizada para hacer tomar conciencia a la sociedad de la importancia de analizarse con profesionales con el fin de prevenir la enfermedad", afirmó la doctora Carmen Alfonso, Mp 00272 especialista en Endocrinología.

Cabe destacar que el cáncer de tiroides es poco frecuente ya que corresponde al 1 por ciento de todos los cánceres y algunos de ellos tienen componente hereditario, "los síntomas más conocidos son la presencia de un bulto o nódulo tiroideo, dolor, molestia al tragar, pérdida de peso, entre otros", detalló la profesional. 

El nódulo lo puede ver el paciente en el espejo o puede aparecer como hallazgo en una ecografia de cuello de control por lo que doctores recomiendan que si existen antecedentes familiares, se observa algún bulto en la zona o se detecta el aumento de tamaño de la glándula se debe hacerse una ecografia tiroidea con el fin de descartar la presencia de la enferdad.

Se realiza ecografia y punción del nódulo con visualización por un especialista en anatomía patológica. La punción se lleva a cabo mediante la aspiración con aguja fina PAAF, un método muy sencillo y rápido que se hace con guía ecografica con el endocrinólogo presente y el especialista en anatomía patológo que controla si la muestra es apta para diagnostico. Luego revisa la muestra y se determina si es cáncer de tiroides o un nódulo benigno.

Si la muestra da positivo al Cáncer de Tiroides se recurre a la cirugía, la cual tiene un alto índice de curacion. En el procedimiento se hace ablación de toda la glándula y luego seguimiento con rastreos y marcadores tumorales con la endocrinologa y terapia de reemplazo hormonal.

"El cáncer de tiroides es infrecuente por ello es muy importante controlarse por lo menos una vez al año las hormonas tiroideas y realizarse una ecografia, más aún si ya notamos la presencia de un nódulo tiroideo", culminó la doctora Alfonso.